Cuando hay una alteración de los niveles de lípidos (LDL colesterol malo elevado; HDL colesterol bueno disminuido; triglicéridos elevados) o de las transaminasas (enzimas hepáticas) suele haber disfunción hepática que no tiene por qué tener patología; pero este trastorno hepático se manifiesta a distintos niveles lo que nos puede indicar que algo está funcionando mal en nuestra sangre que sin ser grave hay que cuidar y revisar. Hay que acudir al m´ñedico de familia y consultar los síntomas y sin duda alimentarse mejor, con menos grasas saturadas, sobre todo las trans. Las grasas trans son un tipo  de grasa que se forma cuando  el aceite normal y líquido se transforma en una  grasa sólida añadiendo hidrógenos en las fábricas de alimntos. Este proceso se  llama hidrogenación y  sirve para incrementar el tiempo  de vida útil de los alimentos. 
SÍNTOMAS DE UN EXCESO DE COLESTAROL MALO O DE TRIGLICÉRIDOS 
 Sensación de pesadez dolorosa en la región hepatovesicular, entre la zona del estómago y los intestinos. 
 Boca pastosa, digestión difícil (en particular con los alimentos grasos, incluida la nata y la mantequilla o frutos secos). 
 Eructos después de las comidas (a veces se acompaña de náusea), acidez en el estómago o en el esófago. 
 Alteración intestinal con tendencia al estreñimiento. 
 Halitosis o mal aliento. 
 Sueño constante después de las comidas. 
 Intolerancia más o menos acusada a ciertos alimentos. 
 Urticaria o picor en la piel. 
 Dolor de cabeza de tipo migrañoso. 

No hay comentarios:
Publicar un comentario