30.1.14

No siempre los acontecidos tienen cara de sufrimiento

Me encontré hoy con la palabra "acontecidos", una de esas palabras un poco escondidas en nuestro uso. 
Tenía la cara acontecida, como triste, ojerosa y melancólica. 
Un acontecido es a quien le acontecen sucesos, cosas, situaciones. Acontecer es suceder. No siempre sufrir. Pero como estamos acostumbrados a que cuando nos suceden cosas, muchas de ellas son negativas, cuando decimos que está acontecido pensamos en que está triste. De hecho una persona con cara acontecida es una persona afligida según el RAE.
En los últimos años casi todos ponemos cara de afligidos, de acontecidos aunque no tengamos motivo. Debe ser para disfrazarnos de sociedad actual. Pero ser pesimistas es negativo y no ayuda a salir de esta. Para vencer hay que estar convencido de que serás capaz, y para la capacidad se necesita autoestima.

¿Qué le ha pasado a Pedro J. Ramírez para perder su Mundo?

Que hayan cesado (o vayan a cesar hoy) a Pedro J. Ramírez no merece una simple nota en las páginas de internet de El País ni El Mundo, como si fuera un asunto SOLO interno de una empresa de manchar papel y no interesara a nadie más. ¿Eso es comunicación moderna y limpia?

Efectivamente no es oficial, solo se ha comunicado a los trabajadores de El Mundo, con lo que tal vez se deba esperar a que el Consejo de Administración de luz a su decisión ya tomada y publique nota alguna hasta que no sea oficial. ¿Pero El País?

Pero J. Se la jugó todo a Orbyt y a presionar contra el gobierno del PP desde la derecha informativa. Y ha perdido en las dos batallas. Rajoy se cabreo brutalmente y dio órdenes claras del desagrado que le producían los disparos de su batallón amigo. Y las presiones dicen, llegaron a los despachos económicos de los socios de El Mundo y a partir de aquí solo era esperar.

Pero J. Ramírez fue cesado por presiones de UCD de la dirección de diario 16. Ahora cae tras haber fundado El Mundo en el año 1989 por presiones del PP. ¿Con qué nos sorprenderá ahora Pedro J.? Pues todo apunta a un diario digital de calidad con más resquemor todavía a los que le han despedido de su puesto de “jefe”.

Las enormes pérdidas en estos dos últimos años, unos 800 millones, nos indica que los medios de comunicación de primer nivel están es una situación muy complicada por diversos factores. Hay que estar atentos pueses una ficha que moverá otras.