23.2.07

Un 23-F de hace 86 años o de hace 26 años. Depende

Hoy nació mi madre allá por el año 1921. Yo no estaba. Hace pues ya 86 años. Muchos pero no tantos. Hoy cumpliría sus 86 años que no son imposibles ni mucho menos, pero tal vez los pulmones o tal vez la tristeza acabaron con ella hace ocho años. Yo también soy responsable de todo.

Hoy también y hace 26 años que por la tarde nos dieron un susto unos señores vestidos de verde. Mis padres estaban de vacaciones de invierno en el pueblo, en la Soria encantadora que no hay que ir nunca a visitar para que no se estropee. La Soria despoblada del Oeste, llena de Duero y vino.

Mis padres aquel día lo pasaron mal, o incluso muy mal, no lo sé. Mi hermano fue de los que tuvieron que llenar la mochila, y no se si mis padres por aquel entonces sabían de aquellas cosas, pero estoy seguro que los padres saben casi siempre más de lo que parece.

Yo para espiar me fui con mi señora esposa a casa de un amigo militar de carrera para vivir desde primera fila cómo se iban desarrollando los hechos. El amigo era de los "buenos" y su padre más todavía, y las horas pasaron casi sin miedo porque todos los teléfonos sonaban e iban indicando que sí que existían movimientos, pero era pocos y de los que ya sabían que estaban dispuesto a joder al ajedrez violento en cualquier momento.

Siempre hemos celebrado el 23-F con tortillas de patata y algunas veces con paticas de cordero rebozadas, un manjar de árabes. 

Hoy tenemos vino del bueno, cena de celebración y hemos cambiado los menús antiguos por uno italiano con pesto y diábolo como salsas para la pasta.

Nos acordamos todos de mi madre, como no puede ser de otra forma. Hasta mañana Pilar.

22.2.07

Cerca de Galilea la "Pacífica"

Yo quiero un rincón así.
Lo encontré cerca de Galilea, la española, la que está en la isla de Mallorca, dentro de una cafetería de pueblo con estufa de leña. Me pareció un lugar tan cálido, tan bien puesto, tan útil con sus revistas dispuestas para ser leídas por los clientes, que tuve que pedir permiso para la foto porque no me atrevía a romper el encanto con un robo.
Su café era bueno, la amabilidad suficiente para ser extraños, la luz que entraba por los ventanales un regalo más, y la zona del fondo un trozo de cielo que es posible que algún día les enseñe, porque está mi señora sentada y pensando y eso es mucha osadía por mi parte.
Lugares así, a 0,90 euros el café, engañan a cualquiera de que es posible la felicidad mirando con buenos ojos.

20.2.07

Argentina es distinta

¿Ustedes quieren saber lo que hacen en Argentina cuando un hijo de 23 años no se quiere ir de casa?

http://weblogs.clarin.com/almacen/archives/2007/01/consejos_para_echar_a_su.html

Son muy distintos a nosotros.
Ellos toman mate y creen en los psicólogos.

¿Estamos viviendo mejor?

Allá por el mes de julio pasado, cuando me hice la pregunta que abrió el blog, me preguntaba si se podía vivir mejor e intenté explicarlo con pequeñas ideas y algunos detalles.
Hoy me pregunto si realmente estamos viviendo mejor que hace un año y lo que es para mi más grave, si nos damos o no cuenta de ello.
Los peligros muchas veces no se ven porque existiendo no se muestran, tenemos que hacer un análisis de abstracción para pensar en la posibilidad futura. Se me puede acusar de pesimista y lo mejor es que sea con razón, pero también de agorero y en este caso solo solicito que escuchen una mañana la radio o lean un periódico. El título del mismo se los dejo a su elección porque todos vienen igual.
Como ciudadanos tenemos la culpa. Así de simple y de duro.
Estoy con sinceridad harto de escuchar que las culpas son de otros cuando no es cierto. Yo, que me he movido por mesas y grupos, por reuniones y enemigos, se que los ciudadanos nos dejamos hacer y permanecemos borregamente tranquilos (y perdonen), pensando que los mismos a los que acusamos de que son unos parias y ladrones serán los que nos resolverán los problemas.
Ustedes se contesten ante tamaño antagonismo y actúen.
¿Cómo pueden ustedes actuar desde su pequeño tamaño?, pues miren hay decenas de modos, y todos no les voy a relatar, pero les aseguro que hay decenas. Se asombrarían de la importancia que pueden tener las opiniones de algun@s que son como ustedes, simples ciudadanos que están en el sitio adecuado cuando hay que opinar. Por ejemplo se asombrarían si supieran quien fue la primera persona que en El Periódico de Aragón solicitó que se hiciera una Expo para Zaragoza o en qué reunión y en qué condiciones se decidió actuar de una manera o de otra ante un tema educativo importante. No podemos dejar que el problema de Irán nos afecte frontalmente (qué idiota soy, ¿verdad?) sin que antes hayamos hecho cada uno de nosotros lo que consideremos oportuno. Nosotros decidimos cuando compramos un coche que no se fabrica en España, cuando lo hacemos con un vino australiano, cuando llenamos los restaurantes caros y nos quejamos del precio, cuando no vamos a votar en un referendum y otros deciden por nosotros si no hemos ido por un motivo o por otro, cuando compramos pisos y nos endeudamos a 40 años, cuando aceptamos un trabajo basura y no seguimos mirando más trabajos para cambiar en cuanto encontremos algo mejor, cuando no queremos estudiar porque es más duro que ver la tele, cuando cedemos y cambiamos la reunión del miércoles porque ese día hay fútbol en la tele, cuando aceptamos que la educación de nuestros hijos se haga dentro de un recinto plagado de problemas y de imbéciles sean estos adultos u otros niños, cuando aceptamos que el problema radica en si tranvía o metro como inversión y no en si pisos baratos dentro de la ciudad o adosados a 20 kilómetros y en el terreno rústico recién recalificado.
Me queda lo de Irán, es verdad. ¿Sabe cuantos europeos están ahora trabajando en ONGs repartidas por todo el mundo y de manera altruista?. Si todos nos moviéramos con la mitad de la fuerza con la que se mueven esos miles de españoles que van a trabajar para evitar un mundo peor, sería sin duda mejor, mucho mejor. Y recuerden que detrás de las guerras siempre hay intereses económicos de empresas con nombre y apellido. Les pongo un ejemplo sencillito ¿saben qué empresa muy conocida en aquellos años financió el golpe de estado en Chile?. Viene en algunos libros. Búsquenla. Si ella hubiera pensado que aquello se iba a saber y que no vendería la mitad de productos de su marca a partir de ese día, se lo hubiera pensado.