28.8.08

Los demócratas en EEUU no saben jugar a ganar o cómo Barack Obama se va a quedar en puertas

Las posibilidades de que Barack Obama sea el nuevo presidente del Mundo son cada vez menores, y es lógico, porque el sistema capitalista funciona muy engrasado y no se puede permitir el lujo de que un negro, joven y además inexperto en el noble arte de jugar a joder, sea el elegido.
Los americanos, todos ellos muy suyos, incluidos los que dicen que votarán a Barack, saben que con las cosas de comer no se juega y que tal y como está el mundo, gracias sobre todo a George W, no deben hacer experimentos.
Así que tendremos que esperar unos años más, para que un joven con ligeros tintes progresistas pueda mandar en el mundo.
Es cierto que se han cometido algunos errores serios en la campaña de Barack, y que equivocarse en política es morir.
¿Se está provocando al mundo para que no gane Barack Obama?

El más “de libro” ha sido no elegir a Hillary como vicepresidenta. Otra ocasión perdida de los asesores de imagen, que no están muy finos en las políticas de este inicio de siglo.

Sin Hillary se pierden muchos votos de segmentos sociales americanos vitales, y no los relato para no dar pistas. En las campañas electorales hay siempre que sumar y nunca que dividir, y a ser posible intentar no restar. Con la elección de Biden se cumplen casi todos los detalles para decir que es una mala elección. Se divide, no se suma y se pone la misma madera que los republicanos en el carro de la continuidad y la falta de carisma. Si para ganar se ofrece como alternativa lo mismo que el rival, los electores indecisos, los que tienen miedo y además perricas en el banco, elegirán a McCain.
Es cierto que las crisis económicas, provocadas o no, pero reales para crear miedo, hubieran modificado el papel de Hillary en las encuestas, nunca se sabrá.

Por cierto, McCain no ha elegido todavía a su Vice.
¿Cómo se comportarían las encuestas ante por ejemplo como candidata a Vice republicano, a una mujer, joven, negra y sobradamente conocida? No digo nombres para no asustar.

Cambiar el cambio

Los cambios son inesperados.
Un día te levantas como cualquier otro esperando poder volver a quejarte por la asfixiante agonía de la monotonía diaria cuando se produce una transformación secreta que visualizamos con recelo.
El cambio es un enigma. Huele a nuevo, es inalienable a la propia existencia, y es mas viejo que la misma. El tiempo es cambio. Y como la vida es tiempo podemos intuir, y la experiencia nos corroborara la certeza, que la vida es cambio.
El cambio es renovación. El cambio es el paso hacia el nudo, desde la tímida introducción, es el desenlace de la acción. Es futuro y es presente, es un viaje incipiente en la nueva forma de vivir, y cambiar.
Y odiamos los cambios, y amamos los cambios, y luchamos por los cambios. Nos frustramos al ver la, visualmente, incorrelación existente entre nuestras acciones y los mismos.
Nos culpamos de los cambios, los tememos, los lloramos, los recordamos.

No hay forma humana de avanzar por el tiempo intentando no cambiar. Quien lo intente está destinado a morir. Y si bien a una persona poco le importe, a la larga, el fútil y ultimo cambio de la vida, para una idea, un proyecto, una ilusión, un futuro creado… la muerte es su perdición.
El cambio no espera. Ni mira por nosotros. El cambio no vela por nuestra seguridad, ni por la supervivencia del más fuerte, ni del más listo, ni del más hábil. No tiene compasión, ni bondad, ni maldad, ni interés. Solo espera ser dominado por aquel al que intenta cambiar.
Solo espera que abramos los ojos y empecemos a actuar, para no rendirnos ante el cambio, para poderlo cambiar.

26.8.08

Posible crisis fría en Georgia

George W. (el hijo) va a dejar la Presidencia mundial con un nuevo error en su haber. Una firma final, torcida y con veneno.
Los políticos que se precian son aquellos que además de gobernar, intuyen; que en vez de provocar son capaces de saber lo que piensa la gente y más todavía sus posibles enemigos.
En la batalla de la estrategia mundial, era un gran error apoyar a Georgia, incitándole a que entrara en la OTAN.
Hasta los muy tontos podrían imaginar que a poco que a los rusos les hiciera efecto la fluoxetina, se levantarían de la cama y empezarían a dar zapatazos en la mesa.
Así ha sido y lo están pagando en sus tierras los georgianos, que no son capaces todavía de saber porqué ahora esa misma OTAN, que tanto decía era la salvación del mundo occidental, no le apoya con más energía que unas palabras de libro.
Podría ser que otra vez la vieja Europa tuviera que pagar los resfriados de todos los tontos unidos, que se dedican a la política como el que juega al ajedrez pero con fichas del parchís.
Mientras tanto Osetia del Sur y Abjazia están contentos pero ya les aviso que vayan comprando garbanzos, pues el invierno puede ser frío.

La vuelta de vacaciones

¡¡Habéis vuelto de vacaciones, puñeter@s!!
Os tengo pillad@s a todos, y se que estáis volviendo a casa para regresar a laborar, mecachis la mar.
¡Bien hallados!
¿Qué tal la crisis económica?, tranquilos, las empresas siguen en su sitio, mucho más jodidas, pero en su mismo sitio. Algunas tan heridas que ni los médicos desearían tratar, pero la economía es lo que tiene, y la vida también. Hay que seguir porque lo que no nos pueden quitar las crisis generales es la sonrisa y las ganas de vivir.
Crisis si, depresión total no.
Va ser un septiembre muy difícil, los datos que ya se intuyen van a ser más que peores, el gobierno no está actuando, creyendo que el mercado todo lo arregla y en parte es cierto, pero lo que no valora es que a veces tarda mucho y mientras tanto se lleva con el vendaval a empresas, ideas, gobiernos, futuros.
Soy de los que creen en la cirugía, en las medidas fuertes cuando los problemas son fuertes, amigo de las ideas nuevas cuando la viejas están caducas. Cierto que cuando hay mucha sed la gaseosa no la evita, pero con cerveza sirve perfectamente para hacer experimentos.
Lo peor es no hacer nada.