5.1.15

¿Por qué fracasan las empresas primerizas?

Es posible que estés a punto de emprender una nueva empresa, trabajo o idea. Pero que el miedo al fracaso te esté atenazando. No te preocupe mucho, es lo normal. ¿Por qué fracasan las empresas que nacen?

Pues muchas veces por no haber pensado con detenimiento que no es lo mismo abrir una empresa o un servicio en una calle o en otra, en un barrio o en otro, en una ciudad o en otra. Por impuestos o por falta de clientes potenciales, por tener mucha competencia o por realizar un servicio que en esa zona no le van a reclamar, por no disponer cerca de buenos profesionales para contratar o por estar muy lejos de proveedores de calidad.

Otro error grave es no tener realizado un buen “plan de negocio” que analice todas las posibilidades. Casi todos los planes de negocio suelen salir negativos, son pesimistas. Es cierto. Pero es mejor saltar al vacío sabiendo qué datos tenemos sobre nuestro proyecto e idea para ponen o no un colchón de un tamaño determinado.

No cometa el error de intentar una empresa sin suficiente formación, sin una experiencia que abarque todos los lados de la empresa, que sepa fabricar y vender, servir y cobrar. El mercado se rige por una reglas muy determinadas y hay que conocerlas. Luego tú las sortearás de una forma o de otra, las modificarás para tu servicio o las adaptarás a tu empresa. Pero al menos conócelas bien antes de jugarte tu futuro.

El dinero es necesario. Esto jode pero es inevitable. Saca cuentas de las de verdad, calcula la inversión, las facturas de los primeros meses, los gastos de seis meses donde tendrás muy poca facturación, los sueldos de todos pues hay que seguir comiendo aunque no se logre cobrar lo facturado, añade los gastos financieros, un remanente para imprevistos, y no tengas miedo. 

Pero es necesario conocer esto pues nada fastidia más a un negocio que tener que conseguir liquidez añadida en los primeros meses de vida, lo que dificulta toda la implantación.

Toda empresa necesita darse a conocer, sea del tipo que sea. Sus clientes, algo imprescindible, ya están ahora servidos por alguien. Tú les vas a solicitar que cambien y para eso hay que ofrecerles algo más que sus actuales proveedores. Hay que trabajar mucho este aspecto y hay que insistir. No es fácil, pero depende de ti. Para eso tendrás que trabajar mucho y muy bien tu proyecto, no hay que olvidarse que todo dependerá de ti.

Los socios son importantes, las compañías de todo tipo en el proyecto de emprendimiento. Pero también suelen ser el gran problema, si contamos solo los problemas que son ajenos a la propia actividad con tus clientes que debes conquistar. 

Los socios y sus relaciones pueden hundir la empresa si no se llevan bien, si no se distribuyen bien los respetos y las funciones. No es fácil la convivencia sobre todo cuando surgen los problemas. Cuando hay que darle más gas, apretar con más brío el acelerador.
No te hundas todavía; si las cosas no van bien, no pienses en el fracaso sino en estudiar las alternativas. Un negocio no da nunca beneficios en poco tiempo, siempre es un proyecto a medio o largo plazo. Por eso hay que analizarlo muy bien y todas sus posibles variables desde el primer día planificando esos tiempos de complicado camino. Recuerda: Plan de Negocio.

Calma, analiza todo al menos una vez al mes en esos primeros tiempos de implantación, mira qué ha salido peor de lo que pensabas en un principio, y cambia acciones antes de desistir definitivamente. Si al final tienen que cerrar la idea, recuerda que nadie te podrá quitar lo que has aprendido. Lo importante no es caer, sino saber levantarse y aprovechar todo lo que has aprendido, que seguro es mucho.

¿Por qué fracasan las empresas?

Es posible que esté a punto de emprender una nueva empresa, trabajo, idea. Pero que el miedo al fracaso le esté atenazando. No se preocupe mucho, es lo normal. ¿Por qué fracasan las empresas?

Pues muchas veces por no haber pensado con detenimiento que no es lo mismo abrir una empresa o un servicio en una calle o en otra, en un barrio o en otro, en una ciudad o en otra. Por impuestos o por falta de clientes potenciales, por tener mucha competencia o por realizar un servicio que en esa zona no le van a reclamar, por no disponer cerca de buenos profesionales para contratar o por estar muy lejos de proveedores de calidad.

Otro error grave es no tener realizado un buen plan de negocio que analice todas las posibilidades. Casi todos los planes de negocio suelen salir negativos, son pesimistas. Es cierto. Pero es mejor saltar al vacío sabiendo qué datos tenemos para ponen o no un colchón de un tamaño determinado.

No cometa el error de intentar una empresa sin suficiente formación, sin una experiencia que abarque todos los lados de la empresa, que sepa fabricar y vender, servir y cobrar. El mercado se rige por una reglas muy determinadas y hay que conocerlas. Luego usted las sorteará de una forma o de otra, las modificará para su servicio o las adaptará a su empresa. Pero al menos conózcalas bien.

El dinero es necesario. Esto jode pero es inevitable. Saque cuentas, calcule la inversión, las facturas de los primeros meses, los gastos de seis meses con muy poca facturación, los sueldos de todos pues hay que seguir comiendo aunque no se logre cobrar lo facturado, los gastos financieros, un remanente para imprevistos, y no tenga miedo. Pero es necesario esto pues nada fastidia más a un negocio que tener que conseguir liquidez en los primeros meses de vida lo que dificulta toda la implantación.

Toda empresa necesita darse a conocer, sea del tipo que sea. Sus clientes, algo imprescindible, ya están ahora servidos por alguien. Tú les vas a solicitar que cambien y para eso hay que ofrecerles algo más que sus actuales proveedores. Hay que trabajar mucho este aspecto y hay que insistir. No es fácil, pero depende de ti. Para eso tendrás que trabajar mucho y muy bien tu proyecto, no hay que olvidarse que todo dependerá de ti.

Los socios son importantes, las compañías de todo tipo en el proyecto de emprendimiento. Pero también suelen ser el gran problema, si contamos solo los ajenos a la propia actividad con tus clientes. Los socios pueden hundir la empresa si no se llevan bien, si no se distribuyen bien los respetos y las funciones. No es fácil la convivencia sobre todo cuando surgen los problemas. Cuando hay que darle más gas, apretar con más brío el acelerador.

No te hundas todavía; si las cosas no van bien, no pienses en el fracaso sino en estudiar las alternativas. Un negocio no da nunca beneficios en poco tiempo, siempre es un proyecto a medio o largo plazo. Por eso hay que analizarlo todo bien desde el primer día planificando esos tiempos de complicado camino. Calma, analiza todo, mira qué ha salido peor de lo que pensabas, y cambia acciones antes de desistir definitivamente. Si al final tienen que cerrar la idea, recuerda que nadie te podrá quitar lo que has aprendido. Lo importante no es caer, sino saber levantarse y aprovechar todo lo que has aprendido, que seguro es mucho.

Alemania contra Grecia. ¿Y qué podría venir después si fracasa Syriza?

A la falta de delicadeza democrática de Alemania asustando a los griegos con la salida del euro, se une la lógica opinión de todos los medios españoles que abrazados por sus dueños que son los que ponen y quitan directores y cargos, han sacado este asunto sin decir la verdad. Que es un chantaje en toda regla para que los griegos no voten a un partido determinado.

Pero nadie se pone a escribir o pensar sobre la posibilidad de que si fracasa Podemos o Syriza pueden venir otras posibilidades bastante peores. Que las sociedades ya no están por la labor de aguantar más y es inevitable el zapatazo. Que las violencias históricas están escritas y se suelen repetir, por desgracia.

Se podría decir sin género de mucha duda que los miedos de Alemania hacia Grecia es un golpe de estado encubierto desde un medio de comunicación extranjero hacia un país al que además considera amigo. ¿Alguien se imagina esta misma acción contra las decisiones de Francia? ¿Se ha hecho esto cuando ha ascendido Le Pen?

Flaco favor le estamos haciendo a Europa si la dejamos en manos de los que tienen el dinero, la deuda de otros países y las ganas de montar una Europa a su deseo y gusto, cuando en realidad somos la unión de países muy diversos ,. Donde sin duda y lo dejan claro todos los días, sigue interesando que haya países ricos y países pobres que hagan de criados de aquellos.

4.1.15

¿Qué votan en España las personas mayores de 45 años?

Hay una variable en casi todos los sondeos a la que se presta muy poca atención por parte de los partidos de izquierda, y es la edad del votante y su segmentación del voto según esta.

Toda la izquierda está convencida de que el voto joven le es fiel, y esto es cierto. Siempre ha sido así y lo sigue siendo. Como también ha sido cierto que el voto joven es el que más abstencionista es y el que más fluctúa el día de las votaciones, entre decidir acudir a votar o quedarse en casa por decisiones de última hora de complejo análisis.

Pero lo curioso es que los partidos de izquierda parecen dar por perdido el voto del ciudadano mayor de 55 años, que suele ser un voto que sí acude a las urnas, que es fiel a votar, que conocimos de cerca la transición, que aprendimos a votar a la vez en el tiempo que aprendíamos a ser adultos.

En el último sondeo publicado, el de la Razón, se mantienen bastante igualada el porcentaje de voto que recibe el PSOE en todas la edades. Pero el PP sube desde un 18,1% entre los jóvenes a un 34% en el segmento de entre 45 y 64 años, para ascender al 49,2% entre los mayores de 65 años.

En el caso de Podemos recibe un 24,5% de intención de voto entre jóvenes para bajar al 7,2% entre los mayores de 65 años, conservando un pequeño dato del 12,8% entre los votantes de 45 a 64 años.

Para IU es el bloque de entre 30 y 44 años el de mayor fidelidad con un 8,2% que baja al 5,8% entre los 45 y 64 años para hundirse en un 2,8% a partir de los 65 años de edad.

Mientras la izquierda no sea capaz de convencer a los más adultos de que ellos son una salida válida a sus necesidades sociales, y que no solo entendemos sus problemas presentes sino también los futuros, o siempre será la derecha con su seguridad la que se llevará este importante voto.