23.3.22

Callarnos es alentar a los violentos manipuladores


En todas las guerras no hay malos ni buenos, hay inocentes y culpables, hay gentes que ordenan y gentes que mueren sin entender casi nada. Pero lo que sí hay en todas las guerras son mentiras, manipulaciones, falsedades creadas para manipular la opinión pública. Y en la invasión de Ucrania por parte de Rusia no podía ser de otra forma. Estoy seguro que por ambos bandos.

Nunca ha existido esta portada de la revista Time, la de Putin, en cambio sí ha existido la otra, la del tanque. pero en algunos medios para demostrar que la revista Time estaba en contra de Rusia y llamaba a Putin un Hitler cualquiera, se ha ido publicitando por redes la la de la izquierda.

Las guerras son tremendas, se pierde el valor de la vida, pero también el de la verdad, el de la honestidad más básica, aunque estés en tu casa tranquilamente. Nos quieren manipular a todos, y no debemos dejarnos, para que no avancemos hacia la violencia desde los silencios.

22.3.22

Las mentiras de todas las guerras


En la Guerra de Ucrania, como en todas las guerras de la historia, la información es un arma, y sobre todo una herramienta que nunca busca la verdad, sino la sensación, la manipulación del que lee o escucha o ve. 

Ahora estamos con esos vídeos en los que vemos a civiles envueltos a farolas, desnudos, torturados, castigados, pintados, abofeteados por militares o por otros civiles.

Es la tortura sobre la tortura. Y es la mentira sobre la mentira. 

¿Qué quieren decir esas imágenes? ¿De quién son y por qué? ¿Qué buscan? El ser humano es cada vez menos humano, y si le ponemos poder se nos convierten en seres animales. Así llevamos muchos siglos, y sin avanzar nada.


21.3.22

Normas de trabajo muy celtibéricas


Hay auténticas normas de trabajo que son de una pura Celtiberia apabullante. Los horarios, el no poder utilizar ciertas zonas o parte de la vivienda, los minutos de la merienda, parece normas lógicas. pero llamar al dueño de la plantación AMO en los finales del siglo XX suena ya a curioso.

Esta cartel estaba en una masía mallorquina, pegado detrás de la puerta de la habitación en donde se cambiaban los trabajadores del campo. Y sí, fumar no está muy bien visto, pero lo que ya está prohibido es fumar porros. En el año 2007 todavía estaba pegado en la puerta, por si era necesario hacerle caso.

20.3.22

Acuerdo sobre el programa de saneamiento y reforma de la economía en España


Cuando el 25 de octubre de 1977 se firmó en la Moncloa el «Acuerdo sobre el programa de saneamiento y reforma de la economía», que fue firmado por el propio Suárez y por Leopoldo Calvo-Sotelo (UCD), Felipe González (PSOE), Manuel Fraga (AP), Santiago Carrillo (PCE), Miquel Roca (CiU), Juan Ajuriaguerra (PNV), Enrique Tierno Galván (PSP), Josep María Triginer (PSC) y Joan Reventós (Convergencia Socialista de Cataluña) pocos podían suponer que aquellos llamados desde el primer día Pactos de la Moncloa darían tanto que hablar por muy diversos motivos.

Eran novedosos, eran atrevidos y arriesgados, no había seguridad de que fueran a funcionar para lo que se necesitaba, muchos tuvieron que ceder lo que no se habían imaginado, con tal de que pudieran salir del atolladero para mejorar una economía española claramente en quiebra y obsoleta.

Hablar en el año 2022 que aquello fue un error, un fracaso o que nunca se deberían haber firmado desde la izqueirda, es tan idiota como pensar hoy y desde hoy, de lo que se podía hacer hace 45 años, con aquella situación en España tan distinta a la nuestra.

Y para muestra simplemente recordar que hace dos años nos prohibieron salir de casa durante varios meses, no nos dejaban luego salir fuera de nuestra localidad y tuvieron que cerrar comercios por ordenes desde arriba. 

Y sin decir que ahora en este marzo 2022 se está aplaudiendo que Alemania diga que debe rearmarse y de forma muy profunda, por los cambios en la Europa que surgirá desde la invasión de Rusia a Ucrania.

La decisiones se toman en los momentos, y analizarlas fuera del campo temporal es una idiotez, con independencia de que pensemos que los resultados fueran bueno o malos, o que desde el punto de vista actual había otra opciones.