8.12.14

También los deportistas se independizan de España

Atacan las huestes que se oponen, a todo lo que se menea. Dentro del PSOE atacan a Sánchez, en sus arrabales atacan a Podemos que les está jodiendo el futuro, el PP se calla y disimula creyendo que es lo que toca mientras desde dentro de los Populares unos hacen piña contra otros. Es la hora de los peones. Santamaría molesta a los que se sienten molestos mientras que en IU no saben qué hacer o ni siquiera si deben hacer.

Es falso que la sociedad no quiere a la política. Lo que no quiere es a esta política de apaños y trampas, de disimulos y mentiras. Pero nosotros, esta sociedad tuya y mía, tampoco es que seamos capaces de sacar las agallas para exigir otra cosa.

Mientras tanto la independencia avanza por España a velocidad de miedo. Ahora son los deportistas los que se independizan de España. Antes han sido los jóvenes licenciados obligados por buscar futuro. Nos vamos a quedar solos e España los jubilados y los miedosos, los pobres y los enfermos de pena. Nuestros nietos serán alemanes, ingleses o australianos, mientras en España solo tendremos a turistas pobres y a cazadores de desiertos llenos de corzos. Nos estamos africanizando a una velocidad de miedo.

7.12.14

Mario Alonso Puig nos recuerda a Platón y a Ortega y Gasset, en positivo

El diario El Mundo entrevista hoy domingo al doctor Mario Alonso Puig que trabajó varios años en EEUU y hoy se dedica más a la superación personal, y a enseñar a crecer en la excelencia personal. Os dejo algunas de sus frases, como ejemplo de pensamiento válido que ayuda a crecer.
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El estado de ánimo de un grupo, de una sociedad, afecta a los resultados que se obtienen, al nivel de eficiencia, pero también a la salud física y mental.



Hoy se sigue leyendo a Platón porque tiene vigencia. Estamos hablando de principios y eso resiste el paso del tiempo, esas referencias no varían. Siempre es más fácil tomar una posición de víctima que de protagonista. A veces las excusas son tan fáciles que quedamos atrapados ahí, pero eso, finalmente, genera resentimiento, frustración, reduce la eficiencia y, además, empeora la salud. Sentirse víctima es un estado de ánimo muy tóxico y, en algún momento, hay que dar un puñetazo en la mesa y decirse "yo no nací para una vida mediocre, sino para una vida llena de orgullo y de ilusión".



Decía Ortega y Gasset que yo soy yo y mis circunstancias, y claro que estas tienen impacto. Condicionan pero no determinan. Es verdad que hay circunstancias en las que se percibe más la ilusión y hay entornos que hacen lo opuesto, que ponen difícil que se pueda vivir con esa pasión.


 No nos definen como humanos los fracasos que tuvimos. Con un entorno más difícil lo que ocurre es que el gesto de soberanía personal es mucho mayor, por eso hay que esforzarse en marcar esa diferencia. La oscuridad más intensa cambia cuando alguien enciende una humilde cerilla.



En la educación, hay que distinguir muy bien dos elementos. El performance y lo que es el potencial. El primero es lo que la persona hace y el potencial es lo que podría hacer o no está haciendo. Muchas veces nos fijamos sólo en cómo lo está haciendo y no en cómo lo podría hacer. En ese salto, ahí es donde el método tiene que mejorar.



Hay que creer que hay personas que tienen dentro energías dormidas y sólo así vas a permitir que esos individuos hagan cosas que no han hecho todavía. Si no crees en el potencial de las personas, no vas a buscarlo. Si tú ves a un alumno y crees que es torpe, lo vas a tratar como tal pero, si lo ves como alguien con potencial, ganará ilusión, participará más y así es como empezará a aflorar ese potencial.



Los líderes son los que ayudan a las personas a conseguir su mejor versión. Se trata de hacerlas sentir que son capaces de encontrar soluciones y eso pide un cambio de mentalidad, porque siempre nos quedamos en una visión obtusa sobre los demás.



Cuando te sientes parte de un equipo a la hora de buscar una solución, tu capacidad funciona de manera diferente. No se trata de que seas alguien capaz sólo de almacenar información. Es, además, poder utilizarla de manera inteligente. El modelo al que vamos en los sistemas de educación es precisamente el que va a enseñar a encontrar respuestas entre mucha información.



En las empresas ya lo han visto, con una figura de líder coach que es el encargado de generar las preguntas para que, entre todos, encuentren una respuesta conjunta. Así debería ser la educación. En empresas como Google, donde tuve la oportunidad de estar este verano, saben que se avanza con esa colaboración.