5.11.14

Los culpables somos nosotros

No debemos comentar nada. Solo preocuparnos de que es verdad. De que piensan efectivamente esto. Pero también de que los culpables somos nosotros.

4.11.14

Desde Barcelona todo se ve hoy totalmente sereno y agradable

Estoy en Barcelona, a escasos 60 metros del gran cartel luminoso que va anunciando como bajan los segundos que faltan para un nuevo país. Para ellos y para nosotros. Todo puede ser nuevo dentro de cuatro días.

El ambiente es muy normal, sereno, agradable, las personas caminan como siempre con sus problemas y dudas, sus éxitos y trabajos, ajenos a lo que se cuece aquí, en el Palacio de la Generalitat. Si acaso en la calle de la plaza y junto al Ayuntamiento, se ven puestos fijos de Antena3 y de Telecinco. Cazadores de novedades.

Pero los catalanes no es que estén absortos ante tamaño desafío a la historia de todos, no, simplemente es que dejan hacer a sus dirigentes. Confían en que se hará lo que se pueda hacer. Ellos esperan al domingo y ya verán.

En mis paseos, comidas o cenas, el trato ha sido exquisito, muy agradable y amable en las conversaciones mantenidas. Algunas largas y de variada temática, no solo nos dedicamos a saludar sino que intentamos palpar las sensaciones. No me siento extranjero, pero tengo una ventaja, se nos nota que somos los primos, somos los aragoneses. Los vecinos familiares.

Aragón tiene un dolor con Cataluña muy mal resuelto. Somos los primos del pueblo, los pobres, los rurales, a los que se les puede quitar las cosas. Somos buena gente y esto es cierto. Se nos aprecia y tenemos un pasado común que pesa y se respeta desde Aragón, no tanto desde Cataluña. Por eso este proceso muchos aragoneses lo vemos de distinta manera, si queremos verlo. Pues nuestra experiencia de relación es amplia.

Cada vez veo más cierto que el proceso va a terminar como a mi no me gusta. Cada vez veo más grande la idiotez de los que nunca han entendido a Cataluña, pues nunca se han preocupado en venir por aquí a dejarse impregnar de esta parte de España. Y sin pisar sus calles, hablar o dormir entre ellos, es imposible entender sus realidades. Entenderlas no es obedecerlas, es aprender a negociar, saber que todo tipo de problema tiene solución excepto los que no tienen solución. Pero estos muchas veces solo han dependido del tiempo para convertirse hoy en imposibles, y con Cataluña los catalanes han sabido jugar mucho mejor todos los tiempos.

3.11.14

Lo importante es el sueldo neto, no los impuestos altos o bajos

No hagáis caso a los agoreros que insisten en que nunca cobraremos pensiones. Es falso, están mediatizados por los bancos y las empresas de seguros que quieren hacernos un plan de jubilaciones privado, que garantiza menos que las pensiones públicas el poder cobrar una cantidad de dinero cuanto seamos mayores y no tengamos trabajo.

Lo que hay que hacer es pelear por que nuestro país siga siendo un país productivo, tenga empleo suficiente para todos, y de una calidad media y alta; no esta basura que actualmente tenemos. Si no somos capaces de colocar a España a la altura de nuestros vecinos europeos, lo de menos será el futuro de las pensiones, lo grave será el futuro como país.

El gran problema de las jubilaciones no es que el Estado no pueda pagarlas, sino lo poco que estamos ganando de sueldo bruto y por ello lo poco que estamos cotizando para tener jubilación en el futuro. La tendremos pero muy baja por lo poco que ahora cobramos de sueldo. Sin olvidarnos de que los jubilados son muy necesarios como consumidores.

Mientras en algunos países se paga entre el 40 y el 60% del sueldo en impuestos, esto nos parece una autentica barbaridad, cuando es un engaño considerarlo así. Con esos impuestos tan altos, quedan sueldos netos de 1.200 euros para un salario mínimo y unos 3.000 euros netos para un salario profesional. Lo grave no es el porcentaje del sueldo que tienes que pagar de impuestos, sino el muy bajo sueldo de los salarios brutos que cobramos en España.

2.11.14

Doctorado en Ciencias Políticas, gratis y sin salir del sofá

Tras ver los resultados de los sondeos de este fin de semana, tanto en El País como de La Sexta, nuestro Mariano Rajoy se habrá quedado anonadado. Lo de menos es creer estos resultados o pensar que es un momento malo que todos los Césares tienen en alguna batalla. Lo malo es pensar que no tienes suelo, que los que aspiran a retirarte de la política lo celebraron con cava, y que muchos de estos eran además amigos.

Queda mucho tiempo hasta dentro de un año, pero los días son semanas para las Generales y meses para las Municipales. Los champiñones crecen por doquier y no se ve energía capaz de doblegar los malos vientos.

En Podemos no se creen nada, pues son listos y saben que estos gráficos no dicen nada. Nada que no sepan, nada que sirva para algo. Ellos agachan la cabeza y siguen por su camino, sin explicarnos qué son, qué quieren, qué saben hacer, pues la sociedad no lo pide. Simplemente quieren mandar a la mierda a los que ahora están.

Vamos a existir en este año a un espectáculo muy interesante. Todos lamiéndose sus heridas, buscando al culpable, mirando entre sus apunten donde está escondida la solución, y terminando soñando con que todo una vez acabado, será mejor para ellos, mucho más tranquilo, escondidos entre la nada.

Lo cierto es que a nadie le gusta perder ni a las canicas. Más, si has decidido entrar en la política, una actividad deportiva como pocas. Aquí todos los días te están examinando y sacar un 6 es muy poca nota. Hasta en las empresas hay más posibilidades de rectificar, de equivocarte, y eso que se juegan también el futuro, el patrimonio, los puestos de trabajo. Pero en política un error es para siempre. En la empresa solo hasta el próximo.

Quien quiera aprender política o sociología que no se pierda los años 2014 y 2015 de España, pues van a ser un Doctorado en no se sabe bien qué. Igual en nada. Pero incluso en ese caso, desactivar todo esto que nos sucede hasta convertirlo en nada, se debería dar en las universidades.