2.3.10

Manifestación en Zaragoza por la jubilación a los 67

La sinceridad debe ser una constante, incluso desde el error. He estado en la manifestación de Zaragoza, en contra del aumento de la edad de jubilación. Hemos sido muy pocos. Sobre unas mil personas. Lo siento, yo sé contar las manifestaciones. No es la primera vez que lo hago, ni la décima.
Se notaba sobre todo la presencia de afiliados de la UGT, casi todos con camisolas de plástico y grandes banderolas, pero mucha menos gente de CCOO y un pequeño grupo del PCE. Nadie con pancartas de otros sindicatos.
Muy pocos, pero menos si restamos a los afiliados de movilización fija. Con sinceridad, gente de la sociedad laboral, gente de a pie, y tú me entiendes, cuatro y casi despistados. Muy mal y lo siento en el alma. Muy mal.
¿Dónde está la gente cabreada?, ¿la gente con muchos problemas laborales?, ¿los de 50 años?, ¿los parados?.
¿No hay parados en Zaragoza?
Me preocupa y mucho esta sensación de incapacidad social, de abatimiento, de asco colectivo. Me preocupa más la abstención social que el cabreo manifestado. El primero puede producir miedo, pero en cambio el segundo sirve para avanzar o al menos para desahogarse.

El contrato que propone la CEOE es una mierda. Con perdón para las mierdas.

Sin duda no esperábamos nada mejor, la CEOE es lo que es. Pero ahora indica claramente a los jòvenes de este país que su despreocupación aparente de la política tendrá el premio de unos contratos todavía peores que los actuales, que ya es decir.

La idea de CEOE es que este contrato tenga "una duración de entre seis meses y un año, sin protección por desempleo ni jubilación (la sanidad ya la tienen con sus padres) y con cuotas empresariales cero", ha explicado el director de Relaciones Laborales de la patronal, José de la Cavada, en los pasillos del Congreso de los Diputados, tras intervenir en la comisión de Trabajo del Congreso.
El responsable de la patronal fue más allá al precisar que esta propuesta se inspira en una medida francesa que "en el mejor de los casos" iguala el salario mínimo interprofesional, aunque eso en España podría revisarse.

Con un contrato de 6 meses a un año y cotización cero, estaríamos viendo un constante recambio de jóvenes en los mismos puestos de trabajo, hasta convertir en fijos los puestos y en super movibles las personas que los ocupan. Una barbaridad de la más rancia patronal, comparable a la del peor tercer mundo.
Se equivocan los empresarios si creen que ese es el camino. Creo que no son todos. 
Para esa jugada ya están otros mercados a los que ellos no quieren acceder. Que pregunten a los empresarios españoles que ya tienen su fábricas en Marruecos, Rumania, etc. que los hay. Que pregunten su rentabilidad y producción con unos sueldos de risa. 
Que pregunten cuantos trabajadores de Rumania se necesitan para hacer la mitad de la producción de Zapatos que en Illueca (Zaragoza)

Los mejores jóvenes se irán, sin duda y España se quedará hecha unos zorros; eso si, los empresarios de la CEOE tendrán más chalet y más criados a precio de risa.