1.9.13

El consumo moderado de vino ayuda a no tener depresión unipolar


Un estudio de la Universidad de Navarra asegura que tomar una copa de vino al día reduce el riesgo de tener depresión, algo que contraria lo que hasta ahora se había dicho siempre, que el alcohol es perjudicial para enfermos deprimidos.

Tras un estudio entre 5.505 personas de ambos sexos, entre 55 y 80 años (media de 67 años), durante (en algunos casos) siete años se concluyó que la ingesta entre 5 y 15 cl de alcohol al día reduce drásticamente las posibilidades de caer en depresión. Esto supone entre dos y siete bebidas alcohólicas a la semana, según su grado de alcohol.

El estudio siempre está basado en depresiones de intensidad baja o moderada, en trastornos unipolares y en personas adultas, con dieta mediterránea y con consumo básico de alcohol  de vino y no de otros tipos de alcoholes más refinados o complejos.

Si bien el estudio concluye con claridad que los bebedores moderados de vino gozan de menos posibilidades de tener depresión, no queda claro el motivo de esto. Puede ser que ya su forma de comportamiento social, su dieta más mediterránea, su manera de entender la vida les predisponga a tomar un vino en las comidas en la misma dirección que les aleja de caer en la depresión o en la tristeza y ansiedad. Sin duda parece también seguro que superar el consumo moderado o bajo del alcohol predispone a la gravedad de las depresiones soportadas.

31.8.13

Antes de emprender, hay que formarse adecuadamente


Tal vez muchos de nosotros sintamos como fundamental en estos tiempos de precariedad laboral —para salir de la actual situación laboral muy mala de seguridad y calidad— la de emprender algún pequeño negocio, alguna actividad que nos reporte una salida profesional y vital. 

Con sinceridad, lo fundamental no es EMPRENDER, es FORMARSE. Antes de emprender un negocio, hay que formarse lo suficiente, que suele ser mucho más de lo que nos imaginamos. Y eso siempre acompañado de la idea clara, de que emprender es una decisión positiva y acertada, pero a la que hay que saber sumarse, con cuidado y con formación.

No es posible emprender nada si antes no estamos suficientemente formado sobre la materia que pensamos emprender, pero desde todas su ópticas y los aspectos paralelos que la acompañan. Tan importante es dar un buen servicio, dar un buen producto o fabricarlo con calidad, como saberlo vender, entender de empresas, de financiación y de rentabilidad.

Usted puede ser un gran técnico, pero además debe ser un buen comercial, un responsable gerente, una tranquila persona de negocios. Sin la formación suficiente en todos estos aspectos de su negocio, lo que usted emprenda estará cojo de alguna pata importante y tendrá más posibilidades de fracasar.

Así que no lo dude, fórmese, hay muchas maneras de aprender y de conseguir información. Pero antes de jugarse sus ahorros y su futuro, analice con calma sus posibilidades y tras encontrar su puntos flojos, fórmese lo suficiente. Por último recordarle que formarse es posible desde muchos aspectos, empleando muchas herramientas. No se fije sólo en aquellos que le prometan una formación de calidad común y general. Deberá aprender desde muchos aspectos, desde muchas variables, con la ayuda de muchas posibilidades.