18.11.09

Dar las gracias y ser amable, claves para tener una vida feliz

Practicar ciertos hábitos como dar las gracias o ser amable con los demás puede constituir la clave para tener una vida más feliz y para relativizar las preocupaciones cotidianas, según la teoría de la Psicología Positiva que pone en práctica la profesora de la Universidad de Valladolid Begoña García Larrauri.
Esta reciente rama de la psicología mantiene que determinados comportamientos, como el humor, motivan un estilo de vida más feliz, según ha explicado Begoña García, que hoy dirige una jornada sobre esta modalidad dentro de las actividades programadas por su institución académica para celebrar la Semana de la Ciencia.

IMPORTANTE EN MÉDICOS Y PROFESORES
La antipatía y el mal humor son contagiosos, del mismo modo que la amabilidad y el buen humor. Si el interlocutor practica éstas ultimas, se convierte en una fuente de satisfacción y de energía que se refleja en los demás.
Esta teoría de la Psicología Positiva es especialmente importante en profesiones como el sanitario o el docente, ya que son sectores en los que se trabaja en contacto con otras personas y, en ocasiones, se convierten en modelos sociales a seguir.

NADA QUE VER CON LA 'RISOTERAPIA'
Para García Larrauri, este planteamiento es distinto a la risoterapia, en la que "no se profundiza, no se va más allá en la idea de la utilidad cotidiana del buen humor, y además no está avalada por una tradición científica", según la psicóloga.
El máximo representante de la Psicología Positiva es el estadounidense Martin Seligman, que tiene una vía de investigación previa que le da prestigio y credibilidad a la nueva tendencia.

CURSOS PARA MEJORAR LA CALIDAD DE VIDA
Begoña García, doctora en Psicología, ha comprobado las virtudes de esta ciencia en algunos de sus estudios centrados en la actitud de algunas personas antes, durante y después de asistir a un curso del valor del sentido del humor.
Tras cuatro meses de seguimiento a una muestra de 80 participantes, la investigación concluyó que la manera de afrontar su calidad de vida había cambiado, así como la capacidad para controlar el estrés.

Alakrana, los secuestros o la teoría de las patatas calientes

Acabado el secuestro es momento de que todos nos sintamos libres para opinar y criticar. Se han salvado las vidas, lo que era primordial en este asunto, y a partir de aquí todos debemos cuestionarnos los sistemas y las formas, las soluciones y los errores.
Los armadores no han cumplido con su obligación, llevando a faenar un barco a zonas peligrosas, sin la autorización del Gobierno de España o lo que es peor, engañando y no haciendo caso a las recomendaciones de los ministerios.
El Gobierno ha sido lento en sus negociaciones, y sólo ha puesto velocidad cuando el propio Zapatero tomó el asunto entre sus manos, demostrando que lo peor que hace José Luis Zapatero es forman equipo.
Pagar rescate es una barbaridad, más si se hace a una banda de asesinos inhumanos, que van a emplear esos dineros en cometer más asesinatos dentro de sus propios países o a seguir comprando armas para secuestrar más barcos. Hay que acabar con estas mafias guerreras sin sentido, que afectan a la seguridad no sólo de barcos occidentales sino de los propios países africanos que no levantan cabeza entre otros motivos por culpa de estos señores de la guerra.
El Gobierno debe quedar como quien propició la negociación pero nunca como quien pagó el rescate. NUNCA.
Me da igual si lo pagó o no, lo que debe quedar totalmente claro para todos, es que NO PAGO. Cualquier debilidad en este punto se volverá contra el Gobierno. Luego, el trabajo que haya realizado el propio Gobierno para la liberación se habrá tenido que hacer con inteligencia (y no militar sólo) para evitar males mayores.
¿Se imaginan a un Gobierno de Zapatero, pillado en renuncio, quedando como el que pagó los millones del rescate?, sería tremendo para todo sistema de defensa antiterrorista, sea interior o exterior. A partir de esos momento, y por la ley escrita de que todos somos iguales ante la ley, cualquier grupo terrorista podría sacar financiación a costa de bastardas acciones. Así que esperemos que el Gobierno haya hecho bien sus deberes.

El Alcalde recula y Expo Paisajes (si se hace) irá al Gállego

Me equivoqué con el Alcalde, iba de farol e intentaba engañar con Ranillas y Expo Paisajes, cuando la única opción válida, como yo planteba hace ya varios meses, era Vadorrey y Las Fuentes.
Los fuleros en política tienene que tener los días contados, sean de la opción política que sea. Y el Alcalde, intentando hacer cambiar la opinión de los partidos de la oposición no es correcta.
Aunque los partidos que no cayeron en la trampa, tampoco se comportaron como debian, pues ahora tienen entre las manos tener que resolver para dentro de un año, una patata caliente.
Si dicen que SI a la Expo Paisaje (ya no hay duda del emplazamiento) tendrán que justificar su cambio de opinión.
Si dicen que NO, los votos en barrios tan importantes para el reparto de concejales, como Las Fuentes, Vadorrey, La Jota, Arrabal, Santa Isabel e incluso San José, marcarán diferencias. Tendrán que conseguir apoyos a su NO en el resto de barrios de la ciudad, a costa de intentar vender la opción de que toda inversión sin sentido, no es buena para la ciudad. Pero el PSOE intentará demostrar que SI es una inversión BUENA para la ciudad, porque es una forma de recoger dineros de otras administraciones que no son muy dadas a ayudar a la ciudad de Zaragoza, incluida la DGA.

Un cambio de cubiletes en el juego de las bolitas, que el Alcalde sabe hacer con maestría, dejando las dudas en los mirones.

17.11.09

Taller de escritura 6. Los adjetivos y su importancia

Hoy propongo un ejercicio complicado en donde tendremos que demostrar un gran dominio del idioma escrito. Vamos a emplear adjetivos, para calificar, para poner apellidos, para enfatizar y poner movimiento o color, pero que a la vez, nos pueden llevar hacia lugares no deseados.

Vamos a relatar una situación, una escena, la que nos guste a nosotros, pero SIN adjetivos explicativos. No deberemos poner ningún adjetivo inútil…, pero nos tiene que quedar la escena creible y fotográfica.

Pongo un pequeño ejemplo:

La habitación del niño estaba montada por una madre que no sabía diferenciar edades. Los muñecos eran de peluche pero los juegos que rodeaban la cuna más parecían de mozalbete que de un bebé recién nacido. Un tirachinas y un catalejo colgaban de una de las barras laterales mientras en otra un coche de bomberos se sujetaba con una cuerda roja al barrote. El bebe lloraba sin recibir consuelo.

Podríamos haber optado por trabajarla con adjetivos y nos podría haber quedado así:

La inmensa habitación del niño estaba montada por una madre extraña que no sabía diferenciar edades. Los muñecos eran nuevos y de peluche, pero los juegos que rodeaban la cuna más parecían de mozalbete crecido que de un bebé recién nacido. Un tirachinas usado y un catalejo viejo colgaban de una de las barras laterales mientras en otra un coche de bomberos se sujetaba con una larga cuerda roja al barrote. El bebe lloraba desconsoladamente.

No se trata de escribir sin ningún adjetivo, sino de intentar dosificarlos y sobre todo, de practicar, jugando con la escritura. 

Muy posiblemente el primer ejemplo sea suficiente para crear la escena y con menos palabras. Muchas veces los adjetivos no aportan nada a la historia. 


¿Es importante saber que el catalejo era viejo?, posiblemente no, lo importante será enterarnos por qué la madre deja colgados esos objetos de la cuna.


Hay que tener en cuenta que los adjetivos nos van a perseguir en todo nuestro escrito. Sin que se repitan mucho, los adjetivos sí deben tener unas voces parecidas en todas las líneas del libro. Si quien relata las situaciones es de los que gustan de emplear adjetivos de una forma muy determinada, debe ser siempre así, y eso además de complicado, puede obligarnos a llevar el relato hacia un lugar determinado. 


Los adjetivos califican la escena, pero también al narrador, al conjunto de la obra.