13.4.14

Las Cámaras de Comercio deben ampliar sus servicios hacia las empresas

De las crisis económicas no se sale nunca. Uno se adapta, se revierten vicios, se defienden derechos, pero el resultado final es una situación diferente, con nuevas reglas de juego social. De las crisis no se sale; nos transformamos.

Pero eso no quiere decir que se salga peor, ni que se salga a la primera, ni que se salga mejor que antes. Hay muy diversas opciones donde intervienen numerosos factores en un tiempo muy indeterminado, que afecta de muy diversa manera a los diferentes colectivos sociales que forman el conjunto poblacional. Excesivas variables.

Esta crisis se quiso minimizar empleando un sistema clásico. No asustando, intentando ir de positivos. Se equivocó el economista de cabecera de Zapatero y sumado al error táctico del tipo de inversión del Plan E y el huracán inmobiliario, nos hundimos mucho más de lo que se dice. Y si no se lo creen miren los vientos que se han llevado bancos y cajas de ahorro sumado al crecimiento de nuestra deuda total.

Pero ahora vamos a intentar hablar de soluciones. La inflación nos la controla Europa. La máquina de hacer billetes y las devaluaciones también. No podemos competir en sueldos contra nuestros competidores pues bajar más supone dejar de consumir internamente. Es un drama tener tanto desempleo aunque no lo sepamos bien todavía. No es lógico para la productividad de un país tener a los mayores de 60 años trabajando y a los jóvenes de 20 a 35 viviendo de sus padres y sin trabajo. Ya sabemos pues qué no está bien.

12.4.14

Sin políticos las procesiones católicas serían más felices

Hoy en una procesión religiosa el público asistente ha vapuleado verbalmente a dos políticos que salían en representación institucional. Mezclar religión y política está mal si lo hacen las izquierdas. Insultar es una debilidad pues solo sirve para desahogar instintos animales. Más si como en este caso es sin motivo, pero haber quien tiene bemoles de salir en defensa del político cuando la moda es apedrearlo.

Hay menos políticos delincuentes que empresarios. Hay ladrones entre los médicos y los curas, entre los carniceros y los dentistas, entre las costureras y los futbolistas. Pero darles cera caliente a los políticos está de moda. Mal vamos con esta moda.

Cada día menos personas quieren ser políticos, lo está logrando la sociedad, en breve será una profesión tan rara como los carboneros o los fotograbadores. Y así, tal vez, seamos más libres. Lo que no queda nada claro es quien gestionará los semáforos, los cementerios y las fiestas patronales, sin contar la sanidad o la educación, la justicia y las obras públicas. Cosas menores todas ellas, si no hay políticos en las procesiones.

11.4.14

¿Son las autonomías el problema o son la solución?

Miguel Sebastián fue ministro de la España socialista de hace unos años. Parecía comedido aunque tan liberal como se espera de un Ministro de Economía o de Industria o de Comercio. Pero ahora se ha soltado la melena teórica y nos ha dicho lo que todavía no se habían atrevido a decirnos desde UPyD, que con tres autonomías deberíamos estar apañados, que sobran todas menos el País V Asco, Cataluña y Galicia. Dice que para ahorrar.

Parece mentira que un señor que se presupone inteligente nos diga esta tontería demagógica que es lo que está esperando escuchar gran parte de españoles. Las autonomías son un gran gasto pero sobre todo por las duplicidades y no por lo que tienen encomendado hacer. El coste de sus parlamentos y sus políticos que tanto se critica es muy menor comparado con los presupuestos reales. Daría igual en cuanto a coste si la sanidad, la justicia, la educación se llevaran desde Madrid o desde Zaragoza. Igual o peor.

Efectivamente y al menos en Aragón con las comarcas, sobran las Diputaciones Provinciales. Y en España sobran las provincias. Sobran muchos ayuntamientos pequeños (aunque allí nadie cobra sueldo) pues ya están las Mancomunidades y las Comarcas para realizar sus labores, aunque insisto sigo sin ver el ahorro real y suficiente en esta última modificación organizativa. No así en las provincias.

¿Qué opinarían los navarros ante tamaña reforma? ¿Por qué sí dejamos independiente a Galicia y nos olvidamos de Aragón? ¿por la lengua y no por su historia o sus leyes?

Es cierto que ante las crisis se pueden plantear optimizaciones como es cierto que las 17 comunidades se podrían convertir en algunas menos. 

Rioja podría ser castellana como Cantabria o Murcia. Pero también habría que preguntarles a todos ellos si prefieren ser castellanos o navarros  o vascos o valencianos o andaluces. No tiene mucho sentido una Ceuta y Melilla como ciudades autónomas cuando lo lógico sería que fueran andaluzas, pero estos ahorros son diminutos. ¿Qué hacemos con Extremadura en esta nueva mezcolanza? ¿Unimos las dos Castillas? ¿Seguiría mandando Madrid sobre todas ellas? ¿Unimos Baleares con Cataluña o preferirían ellos hacerlo con Valencia? ¿Agrupamos Canarias a Andalucía o lo lógico es dejarla como está?

9.4.14

Cataluña es España. Hasta que (mientras) los catalanes quieran

Ayer en el Congreso de los Diputados se dio un pasito más en la idiotez colectiva contra Cataluña. Que sí, que sí, que hay que intuir qué pensaron ayer los catalanes de la calle tras la votación negativa en Madrid, para saber como avanza o retrocede su sentimiento de independencia.

1/ Yo NO QUIERO que Cataluña se separe de España.
2/ Constantemente avanzamos en crear una brecha que se amplía.
3/ Es imposible obligar a querer para cinco millones de ciudadanos lo que no quieren dos millones de ellos.
4/ Es imposible querer para cinco millones de catalanes lo que tampoco quieren los otros tres millones de catalanes.
6/ Nos esforzamos en seguir sin querer entender lo que está sucediendo con Cataluña. Con la España diversa unida por los Reyes Católicos con algunas divergencias muy serias en los siglos posteriores.