14.9.18

GH Vip abrió el zoológico y dejó entrar a personas

El zoológico que ha montado Telecinco con su nuevo programa Gran Hermano Vips es de mostrar al mundo. ¿Y a partir de estos elementos hasta dónde podemos llegar en la próxima situación? El paso es claro, hemos dejado de lado el circo con personas variadas…, para adentrarnos literalmente en el zoológico de personas curiosas. 

La duda no es si lograremos ver un colgajo de señora mayor o una pelea entre enfermos de la tontería, la duda es saber el grado de insultos y de medias mentiras que se irán sembrando para los meses posteriores. Y si hay suerte, un par de hostias entre algunas personas colgadas de lo suyo no iría mal del todo para la audiencia.

Algo es algo, si el resultado final es bueno. Es decir, si se logra entretener a una parte de España, ahora que las cosas están tan malitas y para muchos es mejor no pensar más que en gallinas y sexos vacíos.

Es verdad que la segmentación de la televisión es imparable y que las opciones de ver ahora los programas a la carta y sin horario fijo hace que se tengan que replantear las cadenas toda la programación.

Estoy seguro que vamos a ver giros curiosos en muchas más cadenas que en la nombrada Telecinco. Es lo que toca cuando algo fundamental se mueve de espacio y las publicidades saben que invertir y obtener rentabilidad ya no es tan sencillo.

España se dignifica exigiendo calidad

Nos lo estamos pasando cañón jodiendo a los Másteres de este santo país que no sabe cuidar a su Universidad. Somos zoquetes de premio a la estulticia humana. ¿Qué pensarán en otros países normales? Ahora tendremos que buscar políticos que quieran serlo y que como poco tengan la EGB terminada, pues al resto les va a entrar canguelo y van a preferir ser cualquier otra cosa que ministros.

"Buscamos voluntarios para la política que sean mayores de edad y sepan leer y escribir. Abstenerse los que hayan copiado en los cuadernos de Rubio".

La solución pasa por dignificar la Universidad a coste de más controles, más dinero y más cuidado de los profesores. La actual situación es un caso y con perdón, una basurilla que no nos merecemos como país europeo. O rejuvenecemos la Universidad española y la dotamos de más calidad y controles, o se nos escapa otro trozo de país, aunque llenemos los balcones de telas de colores. España se reivindica dotándola de calidad, no con trapos.

Internet será controlado por los poderes

Los tiempos son tan curiosos y raros que ya nada es sólido. Tras modificar las leyes para que publicar en internet sea más complicado y menos libre aunque lo hagas sin ánimo lucrativo, surgen las preguntas a miles encerradas en una sola: ¿Merece la pena seguir escribiendo y publicando en blog y similares? 

En realidad el debate es otro, surge el deseo claro de controlar internet y sus contenidos, no tanto por los derechos de autor, como por las manipulaciones mentales de unos contra otros. Y en esos deseos de “controlar” la herramienta, el vehículo, puede caer de todo y contra todos.

Si poner una imagen con unos pocos K en internet es violar derechos de autor, casi en la misma medida que robar la obra original, estamos abriendo unas puertas amplisimas a que internet pierda gran parte de su contenido actual. Si se trata de compensar de alguna pequeña manera a los dueños de los derechos deberían ser las grandes empresas contenedores que sí obtienen enormes beneficios con sus servicios y donde el altruismo de muchas páginas saben rentabilizarlo para su exclusivo beneficio. Pero nunca el usuario que además de ser pasivo es activo y a veces deja, copia, intercambia, multiplica, noticias o imágenes de muy dudosa calidad.

Las bombas españolas no tienen efectos secundarios

Es tranquilizador que a la sociedad nos traten como a imbéciles, eso nos hace sufrir mucho menos, ser más felices a costa de que nos mientan. Es simpático ver como en el siglo XXI todavía disfrazan la verdad para no darnos disgustos. Ahora ha sido Borrell advirtiendo que las 400 bombas que vendemos a Arabia Saudí no van a producir efectos colaterales, que es tanto como decir que son muy eficaces y que solo matarán allí donde caigan. Un alivio. Las bombas son para matar y destruir, no sirven para hacer paella ni para fabricar escuelas.

Todo nos lo quieren disfrazar por nuestra tranquilidad. Sería más lógico y adulto que se nos dijera que las bombas hay que venderlas, sabiendo que van a matar, porque necesitamos dinero para hacer funcionar España. Y que parte de nuestra industria nacional sirve para eso, para matar. Pero eso igual nos hacía sentirnos mal como españoles de bandera. Mejor así, que se nos trate como a niños, que al fin, es lo que parecemos ser como grupo social.