Eran años duros, de fusilamientos tardíos para mantener los miedos, y dónde la revista Cuadernos para el Diálogo daba espacio a ligeras críticas, por entonces duras críticas, que no siempre las soportaba el régimen militar.
Sí, realmente aunque por aquellos años ya mandaban en España los civiles de la Falange o de la Obra, seguía el poder real en manos de los militares y los banqueros.
Cuadernos para el Diálogo moría tras 336 números de vida democrática desde dentro de la dictadura, sin que nadie supiera mantener al menos su cabecera. Un gran error, pues muere por el éxito de El País y hoy estoy seguro, se apena de no haber sabido mantener el concepto de Cuadernos para el Diálogo, como su revista dominical.
Era marzo de 1976 cuando Vitoria saltó a los medios de comunicación de media Europa por unos asesinatos impresentables en cualquier sociedad, donde murieron cinco trabajadores al salir de la iglesia San Francisco de Asís y otros 150 quedaron heridos. Los detalles de aquella tarde os la dejo a vosotros, buscarlos. Era la forma en la que la policía actuaba contra los trabajadores y estudiantes.
"Yo, siendo europeo, puedo ir a 180 países del mundo solo con mi pasaporte. Si tú eres senegalés, esos 180 países se limitan a seis u ocho" Martín Habiague
Nota.: La fotografía es del artista Pepo Jiménez
El PSOE se está ¿riendo o mareando? de Podemos con sus ofertas ambiguas y de preescolar y lo saben todos los implicados. Los motivos son tácticos. Quieren otras elecciones generales para sacar más diputados, mejor posición en el Congreso. Ante esta realidad lo lógico sería pedirle a Podemos que dijera que NO con la misma contundencia que lo están toreando, aunque sepa que esto es lo que quiere el PSOE, lo que es negativo para España en el corto plazo, y lo que nos lleva a más meses sin gobierno en plenitud de capacidades.
Pero el respeto en política y en cualquier tipo de relaciones es además de básico, exigible e imprescindible. Cuando se falta al respeto, todo lo demás puede caber y ser utilizado. La izquierda también debe exigir ser respetada aunque no le beneficie en el corto plazo.
