25.4.08

Los trabajadores mayores de 50 años y la pobreza

En estos momentos TVE (y como ellas varias grandes empresas más en España) están en un proceso de prejubilaciones anticipadas (ERE) que si aprueban los trabajadores en referéndum, llevará a su casa a 4.150 trabajadores mayores de 52 años. No es entendible que este mismo sistema de adaptación terrible de las plantillas no sea posible en todo tipo de empresas. Y me explico.
Lo malo es que se prescinda de trabajadores a esa edad.
Pero lo peor para los trabajadores es que muchas empresas pequeñas y medianas en crisis, al no poder hacer uso de ese sistema, directamente utilizan el sistema del despido o del mobing.
Según la Constitución todos los españoles somos iguales ante la Ley. Pero en este sistema de limpieza laboral neoliberal, los perjudicados son los trabajadores que tienen la mala suerte de trabajar en una empresa sin nombre. Porque encima lo grave no es que esos trabajadores terminen en el apro y sin posibilidades de encontrar trabajo, lo realmente vergonzoso es que estas personas dispongan para su jubilación de unos varemos de cotización que tienen en cuenta estos últimos años, lo que les convierte además en jubilados pobres para el futuro.
No es recomendable que las personas de 52 años se vayan al paro o a la jubilación, pero mucho menos lo es, que se vayan a la pobreza.

Otro horario laboral es posible o cómo conseguir los viernes fiesta

En otra entrada dábamos el ejemplo de un horario diario de 12 horas. Hoy vamos a intentar en una empresa pequeña, sin turnos, conseguir que la mitad de los viernes sean fiesta y sin que la empresa cierre ese día, sin que deje de dar el servicio que debe.
La plantilla de la empresa se divide teóricamente en dos bloques que irán turnando el horario. En realidad el cambio entre los dos grupos solo afecta al viernes.
Todo el Grupo A trabaja de lunes a jueves, de 7 de la mañana a 16 de la tarde. Es decir 9 horas con una parada de 15 minutos para un bocadillo fuerte como se hace en todos los turnos seguidos. Este grupo sale el jueves a las 16 horas y ya no tiene que volver a trabajar hasta el lunes a las 7 de la mañana.
Todo el Grupo B trabaja de lunes a jueves, de 7 de la mañana a 16 de la tarde. Es decir 9 horas al igual que el Grupo A, pero acude a trabajar también el viernes con el mismo horario o de 7 a 15 horas, dependiendo de convenios. En un caso haría 40,5 horas a la semana y en el segundo 40 horas a la semana. Saldría el viernes a las 15 horas de trabajar y no volvería hasta el lunes a las 7 de la mañana.
La empresa estaría abierta y dando servicio los 6 días de la semana. Si, el viernes solo está media plantilla, pero es en muchos sectores un día más de entrega de trabajo terminado que de gestionar urgentemente trabajo nuevo. Hay que tener en cuenta que el resto de la semana se produce en la empresa durante 9 horas, luego se trabaja más y se organiza mejor. Sin duda además, los operarios estarán mucho más descansados y más motivados en esta empresa, que en otra en la que uno sale de casa a las 7,15 para terminar el trabajo a las 19 horas, eso si, después de un descanso para la comida de a veces más de 3 horas. ¿Qué puede hacer una persona con su día a día si emplea en los cuatro viajes entre 2 y 3 horas añadidas al horario laboral?
Absurdo horario español.