15.7.20

El Crack Cero. Una película antigua muy moderna

Hay películas de cine que saben retratar los ambientes antiguos de forma magistral. Pero si son películas modernas se nota que están realizadas ahora. Es una manera de representar historias viejas con ambientes antiguos pero desde el punto de vista o las técnicas o los "idiomas" actuales.

El crack cero, de José Luis Garci no es así. Es una película antigua de 2019, hecha con los idiomas cinematográficos antiguos, y eso la convierte en encantadora. Y te lleva a tener que elegir. O la odias o te encanta. A mi me ha encantado. Si idioma, su velocidad, su ambiente es de 1975. Todo hecho en el 2019. Incluso su forma de ser teatro, de saber hablar como en una novela, de restarte la sangre, de jugar con la psicología de los personajes.

El Arte muchas veces es engañar. Y provocar que caigamos durante un tiempo en el engaño que provoca el artista. En este caso los actores están tan sumamente bien dirigidos que caes enseguida en su engaño. No solos son personajes ficticios, es que realmente están viviendo en 1975 mientras los ves ahora, en el 2020. Es un Misterio del Tiempo, más que un Ministerio, aunque para Garci se haya convertido en un Ministerio saber jugar con los tiempos.

Excelente precuela de El Crack de los años 80 que no desmerece nada y que sabe jugar con las formas, los tonos, la música y los ambientes. Un lujo poderla ver ahora, tan moderna y tan antigua.

14.7.20

El ruido nos impide dialogar con calma

Este cartel callejero tiene toda la razón aunque cada vez seamos menos los que estemos a su lado. Nos sobra ruido, falta de respeto entre todos, estamos histéricos y saltamos enseguida. ¿Nos iremos quedando solos?

Hoy he vivido con un simple cartel una situación absurda. Un grupo de personas se han enzarzado a discutir contenidos, formas, llegando al grito e incluso al abandono de alguno de sus integrantes del lugar. Era mínimo el asunto. Pero estamos a flor de piel y nos vamos. Rompemos.

Esa falta de tranquilidad, de silencios incluso, de calma lógica… nos está bloqueando las soluciones. Me han intentado explicar una pelea entre un respetable periodista con muchos años de oficio y un político tramposo y no he querido caer en la trampa de escucharlos. Yo sin escuchar sus diferencias ya sé quien quiero que tenga razón.

No es tiempo de callarse, pero posiblemente menos todavía de salirnos del tarro de la calma a las primeras de cambio. Sé, sabemos que en cuanto esto amaine todo va a cambiar profundamente. Hay que prepararse para ello.