11.3.10

Consideraciones sobe el trabajo de los cooperantes.

Ha sido de una enorme alegría poder contemplar libre a la cooperante Alicia Gámez, pero esperando la liberación de los todavía otros dos compañeros secuestrados, que se antoja algo más compleja, tal vez deberíamos plantearnos algunas consideraciones sobre la cooperación con otros países.
Tal vez la primera duda surge cuando se conoce que hay un gran número de ciudadanos de muy buena fe que acuden de cooperantes a estos países por libre, sin estar amparados tras una gran organización humanitaria. Lo hacen totalmente por libre o acompañados de pequeñas organizaciones in muchas posibilidades de defensa y organización, una vez que empiezan a trabajar en los países a donde acuden.
Pero hay también un número de personas que acuden como cooperantes por decisión propia, con el ánimo de trabajar en estos países y poder ampliar sus conocimientos o incluso en algunos casos, conocer de primera mano aquellas zonas por diversos motivos, algunos maravillosos pero otros no tanto.
Un cooperante es un trabajador que cobra por realizar su trabajo; no es un voluntario que acude a la llamada de una gran organización humanitaria y trabaja gratuitamente amparada por esta. La diferencia es enorme a la hora de valorar los riesgos y de tener una defensa más cerrada antes los problemas de seguridad de ciertas zonas del planeta.
Los Estados no pueden (no podrán en el futuro, por saturación) acudir a socorrer a todas las situaciones que se vayan dando en el mundo de la cooperación. Será imposible si antes no somos capaces de acabar con ciertas prácticas que van en aumento.
Los grupos terroristas, violentos, armados o de liberación necesitan dinero pero sobre todo notoriedad. Ponen en serios aprietos a los gobiernos occidentales, que deben rendirse ante solicitudes casi imposibles de explicar. El problema se convierte en muy serio, por mucho que los servicios secretos hacen un trabajo de ingeniería política y diplomática para que sean otros países los que aparezcan como negociadores y pagadores de los rescates.
Los trabajadores voluntarios que acuden como cooperantes deben trabajar con todas las garantías, pero deben ir con todas ellas también, amparadas dentro de proyectos de gran calado o si no es así, saber que van bajo su responsabilidad. Habrá que dar directrices muy claras al respecto para que no se sigan produciendo escaladas de secuestros que tanta rentabilidad dan a grupos violentos.

Google incluye a España en la lista de países censores de Internet

Llevamos un tiempo excesivo criminalizando a Google, tanto por su posición dominante en el mercado de buscadores como ante el intento de cobrarle por tráficos de datos.
Google es (casi) imprescindible hoy en día. No es posible imaginarse un país al que no se le diera permiso para utilizar Google, por parte de su gobierno o por parte del buscador, que no aceptara alguna de las normas que se dictaran.
Google es sobre todo un servicio muy util en internet y hoy sin un buscador como Google sería complejo tener la misma calidad en internet.
Es cierto que su propotencia (aupada por los clientes que buscamos) tiene un peligro que hay que revisar y sobre todo controlar. De momento no hay dudas sobre la limñieza de su sistema de búsquedas excepto tal vez en temas de búsqueda sexual.
Pero el país que perdiera los servicios de Google perdería calidad formativa, informativa y tecnológica. Existen otros buscadores en el mercado de internet y si son menos utilizados es por culpa en casi todos los casos de los internautas que optamos por el que consideramos mejor.
Si aceptamos el mercado como un elemento que mueve el sistema y si somos libres de elegir entre un buscador u otro, no tiene sentido intentar bloquear el crecimiento de un gran buscador a costa de anuncios y amenazas que en nada benefician al consumidor final.
¿Qué pedazo de la tarde del mecado ocupa Word, Photoshop, Firefox o Acrobat? Y nadie se plantea poner zancadillas a Adobe y sus PDF por poner un ejemplo simple?

Algunos apuntes sobre depresión

La depresion comienza siendo un estado de animo que puede llegar a convertirse en una verdadera enfermedad,  es decir que la depre no es ningun rollo exclusivo de yupis y de mujeres sin ocupación, aunque si puede convertirse en una postura enfermiza algo cómoda para el que la padece en su forma más leve.
    Podemos decir que la depresion no se contagia a traves de un beso o por medio de un estornudo. Pero hay que fijarse, la depre tiene su virulencia psicológica y bien puede incubarse en un ambiente depresivo, conflictivo o restrictivo. Como diria alguien, “herencia por convivencia“, y es que lo malo se pega con mayor facilidad que lo bueno.

    Y recordar siempre, que es una enfermedad con muy diversos grados, y que contra más tiempo pasemos sin tratamiento profesional, más grave será y más complicada su recuperación y que en muchos casos depende de nosotr@s mism@s el que podamos salir con fuerza de ella.

    10.3.10

    Diez propósitos de lectura para el año 2010

     Me parece tan fabuloso este post de desequilibros, que se lo copio y le doy más virus multiplicador.

    1. Leer menos sobre libros y leer más libros
    2. Releer más. Hay libros que merecen una segunda lectura. O tercera. O cuarta…
    3. Ordenar la biblioteca en papel y desprenderme de los libros que no me gustaron y de los que sé que nunca leeré. Aprovechar que la biblioteca digital aún es pequeña para clasificar bien los títulos desde el principio.
    4. Donar esos libros que no quiero conservar al mercadillo de Ediciona en Sant Jordi. Los revenden por 2 euros y los ingresos van a una buena causa.
    5. Abandonar la lectura si en la página 50 ya se ve que el libro no cumple las expectativas ni las cumplirá, es malo o aburrido. El tiempo de lectura es valiosísimo y hay que aprovecharlo al máximo.
    6. Ejercer el derecho de queja si el libro está mal traducido o mal editado. Los blogs son muy útiles para este propósito. Y también las redes sociales de lectores.
    7. No comprar libros compulsivamente sin antes haber ojeado las primeras páginas o haber leído las opiniones de otros lectores. No dejarme llevar por el flechazo de una buena cubierta. Evita llevar a cabo los propósitos 5 y 6.
    8. Regalar los libros que me gustan (no necesariamente mi ejemplar).
    9. Participar activamente en las redes de recomendación de lectura y dejar se ser un mero espectador/beneficiario de las recomendaciones y advertencias de los demás lectores.
    10. Ir más a menudo a las librerías que me gustan y disfrutar viendo y tocando libros.