27.9.11

El cansancio grave es uno de los síntomas más normales en la ansiedad

Las personas que sufren de ansiedad es normal que entre los síntomas más complejos de entender esté el cansancio, y digo complicado de entender dirigiéndome a los que rodean a la persona enferma, que muchas veces achacan este cansancio a otros motivos, incluso a exageraciones del enfermo.
Lo cierto es que en la ansiedad los neurotransmisores dejan de producir dopamina y serotonina, substancias del placer y es por ello por lo que el cuerpo se agota físicamente y por lo que parte de los tratamientos para esos cansancios por ansiedad se recetan antidepresivos y ansiolítos, ya que el cuerpo deja de producir naturalmente estos componentes, la dopamina y la serotonina.

La ansiedad es muy lenta de tratar y requiere un constante tratamiento al pie de la letra, que lleva a desanimar muchas veces a los enfermos. Todo tipo de tratamiento suele ir acompañado de ejercicio físico pues este libera de forma natural endorfinas que ayudan a sentirse mejor. Ejercicio físico que es recomendable que sea activo, que sirva para cansarse naturalmente, que sea capaz de liberar tensión y energía.

Va muy bien tomar infusiones de tila, pasiflora, valeriana o hipérico, pero mucho cuidado con sumar a un tratamiento antidepresivo o ansiolítico infusiones sin control, pues en realidad son dosis de productos naturales que se suman a los químicos. También sirve tomar vitaminas y minerales, pero con control médico para revisar que no produzca un problema en riñón sobre todo.
En la misma medida y sin ninguna contraindicación, funciona muy bien realizar ejercicios de respiración: Cierra los ojos. Pon las dos manos sobre el vientre sin apoyarlas. Inspira suavemente sintiendo como el vientre se eleva contra las manos. Relájate espirando lentamente. Repite muchas veces. Este simple ejercicio, libera el diafragma y le permite una mejor oxigenación y una mejor eliminación de las toxinas. La respiración tiene unos sorprendentes poderes de recuperación y sanación. Controlando la respiración se puede alterar nuestro estado mental.

La respiración debe administrarse consciente, inteligente y juiciosamente para que sea completamente efectiva.
Para calmar la ansiedad puedes prolongar las exhalaciones.
Para aliviar el cansancio puedes alargar las inhalaciones.
Para levantar el ánimo alicaído iguala la duración de las inhalaciones y las exhalaciones

26.9.11

Todos soñamos con nuestra isla desierta en donde escondernos

Tal vez todos soñamos muchas veces con una isla desierta, una isla única en donde estemos solos, casi abandonados. Ayer escuché a una joven actriz de teatro y cine comentar que en una ocasión se encerró 48 horas en un wc para sentir la soledad de un espacio pequeño y aburrido, cerrado y abandonado. No dijo a nadie que estaba allí encerrada, se despojó de teléfonos y se procuró comida para esos dos días. Era sentirse encerrada en un espacio pequeño, provista solo de una libreta para ir apuntando sus sensaciones. La claustrofobia era uno de sus retos, el no tener ventana otro de ellos, el no desear contacto con el exterior y la sensación de abandono y vacío el último. La incomodidad del lugar húmedo y pequeño un añadido.

Todos tal vez, deseamos más de una vez estar abandonados, perdidos en un lugar desamparado y sobre todo estar solos. Tal vez así nos reencontremos con más seguridad en nosotros mismos. Tal vez así, uno o una se conozca un poco mejor. Dos días dan para mucho, y es muy sencillo probarlo. ¿Te apuntas?

Qué debemos conocer antes de reinvertir la capitalización del desempleo, del paro

Según se informa, la Cámara de Comercio e Industria de Zaragoza ha atendido en lo que va de año 2011 más de 600 consultas de emprendedores y ha contabilizado hasta 60.000 descargas de sus guías "on line" para montar un negocio; el doble que el año pasado, fundamentalmente de parados con pocas perspectivas laborales. Se han analizando más de 100 proyectos de estudios de viabilida. 

Los nuevos emprendedores, según informa la Cámara de Zaragoza, lejos de "lanzarse a la aventura", demandan cada vez más información y recursos antes de poner en marcha su iniciativa, y se decantan por comercios y empresas tradicionales que requieren poca inversión, ya que en muchos casos suelen capitalizar el paro para iniciar la actividad. Sistema este no siempre muy recomendable, pues a la hora de iniciar actividades empresariales hay que tener en cuenta muchos más factores que los meramente posibles por disponer de una pequeña cantidad para invertir. Hay que analizar si estamos capacitados para emprender esa nueva actividad elegida, si el mercado demanda este servicio, si el lugar elegido es el correcto, analizar competencia, precios, mercado, posibilidades de dar servicio añadido, etc.
Los pequeños comercios, los bares, iniciativas relacionadas con la estética y la salud y las fruterías son los negocios que más interés despiertan.

Para ayudar a resolver las dudas de los emprendedores, la web de la Cámara de Comercio (www.camarazaragoza.com) cuenta con guías gratuitas de proyectos de negocio, elaboradas gracias a la colaboración con el Instituto Aragonés de Empleo.
Existen manuales específicos para 25 de los negocios que más demandan los emprendedores. Los que despiertan más interés son los relativos a centros de tercera edad y restaurantes, con el 14 y el 13 % de las descargas, respectivamente. Les siguen las guías para abrir carnicerías (10,8 %), cafeterías (9,5 %), fruterías (7,8%), centros de comidas preparadas (5,7 %), empresas de turismo activo de aventura (4,5 %), heladerías (3,8 %), albergues (3,4 %) y centros de "piercing" y tatuajes (3,3 %).

Antes de decidir invertir la capitalización del desempleo en un nuevo negocio, algo muy interesante si se sabe hacer con profesionalidad, hay que analizar muchos factores y es muy conveniente hacerlo de la mano de algún profesional amigo que nos ayude en el asesoramiento y análisis. No hay que dejarse llevar por los análisis sencillos que uno mismo hace con el convencimiento de que “es posible”. Siempre se necesita un “Pepito Grillo” que nos ponga los problemas antes de que estos surjan, encima de la mesa del análisis. No es siempre necesario acudir a un consultor profesional, pero tampoco es mala idea, pues estamos invirtiendo nuestros ahorros y nuestro futuro. Estamos invirtiendo la capitalización del apro, pero también algunos ahorros, muchas ilusiones, un tiempo precioso, nuestro oficio, la mejor posibilidad de crear nuestro puesto de trabajo y según la edad que tengamos, nuestra jubilacion. Asuntos todos, más que interesantes como para asegurarnos bien sobre la forma mejor para hacer la inversión, para asegurarnos nuestro proyecto.

Diferencia entre estrés bueno y estrés malo

Cuando hablamos de estrés siempre pensamos en una reacción negativa para y desde nuestro cuerpo humano, pero la realidad es que no siempre es así. Un nivel de estrés controlable y no crónico es positivo para las personas. Es necesario para lograr ciertos objetivos. Sin estrés somos menos capaces. Lo malo no es el estrés sino la cantidad de estrés y la forma en que somos o no somos capaces de controlarlo y dominarlo.

Del estrés básico nos sabemos adaptar todos, y resulta muy positivo para alcanzar ciertos grados de eficacia y de reacción ante retos y gestiones que todo ser humano tiene que realizar muchas veces cada mes, incluso muchas veces cada día.

Pero cuando el estrés asciende peligrosamente o es excesivo el tiempo que se mantiene en lo alto de su nivel asumible —nivel que varía en cada persona—, cuando se convierte en crónico el descontrol, entonces surgen los problemas de salud.

Hay pues un estrés positivo, controlable o bueno y un estrés negativo, persistente, excesivo o malo, cuando este supera lo que nosotros mismos podemos soportar, bien por potencia del nivel de estrés o bien por excesivo tiempo dentro del nivel de estrés máximo.

Un nivel de estrés soportable nos sirve como impulso para resolver problemas, para ser más práctico en las tareas que tenemos que resolver en la vida. Pero es bueno saber controlarlo y dominarlo. 

Es imprescindible saber en qué hay que bajar el motor del estrés y aflojar la marcha. No es nada fácil, lo sabemos, pero es inevitable. Si creemos estar acostumbrándonos a unos niveles de estrés muy altos, estamos ya en el punto en el que el estrés se está apoderando de nosotros. De allí a los problemas de salud hay un paso.

No olvidar que tras un periodo de estrés se alcanza el nivel máximo de eficacia personal, pero una vez mantenidos en ese punto, nuestro nivel de efectividad empieza a bajar, incluso aunque aumentemos nuestro nivel de estrés para intentar resolver los problemas. 

No por aumentar más nuestro nivel de entrega, de estrés ante la vida, seremos mas capaces, pues una vez superado nuestro nivel máximo, empezaremos a bajar nuestra capacidad resolutiva. 

Y recordemos que cada persona es capaz de dominar una cantidad diferente de estrés máximo y que incluso nuestra capacidad varía en el tiempo por muy diversos motivos. Hacia abajo o hacia arriba.