12.3.12

9 ideas a tener en cuenta, para crear una nueva empresa

Estamos en un momento social en el que muchas personas se están planteando la posibilidad de crear una empresa nueva, de emprender una idea novedosa o no, de invertir en una posibilidad laboral propia. Pero hay que tener en cuenta una seria de factores que pueden resultar claves para no fracasar.

 La formación es fundamental, pero desear seguir aprendiendo cada día y es también básico para decidir dar el paso hacia la creación de una nueva empresa.

 Los clientes están esperando buenos y nuevos servicios, adaptados a sus necesidades de todo tipo, en donde se respete y cuide la figura del cliente, para que vuelva a consumir el servicio.

 Hay que conocer bien el mercado sobre el que intentamos crear una nueva empresa, sobre el que deseamos emprender una nueva inversión. Analizar el mercado de proximidad a nuestra actividad, tanto geográfica como de servicios iguales, para saber sus puntos fuertes y débiles, y así no cometer los mismos errores. No olvidar que “sus” clientes tiene que ser “nuestros” clientes.

 Hay que conocer bien la competencia para saber sus precios de venta, sus servicios añadidos, el precio que pagan a los proveedores, quien les suministra y de qué forma lo que luego venden, qué tipo de gasto fijos soportan, adivinar qué podemos ofrecer nosotros para que nos diferencia de sus servicios y así conseguir y fidelizar a los clientes.

 Hay que tener un soporte financiero suficiente para unos meses primeros que serán siempre complicados. Hay que tener una reserva económica o de no disponer de ella hay que contemplarla a la hora de solicitar financiación externa. 

 Nunca hay que hacer gastos excesivos a la hora de montar una nueva idea, una empresa que nace. No es necesario gastar de más, nunca, para iniciar una actividad. Todo es muy caro y las reservas nunca se sabe en qué momento las necesitaremos.

 Conocer muy bien a las empresas y personas que nos van a suministrar los productos que vamos a vender o sobre los que vamos a dar un servicio. Hay que negociar precios, condiciones, plazos de entrega, formas y calidades. Es posible que no sepamos los suficiente sobre los precios que pagan las empresas de la competencia por lo mismo que nosotros ahora compramos. No hay que fiarse de lo que se nos diga, si no es información veraz que venga desde varias fuentes, a ser posibles indirectas y fáciles de comparar. Nada como tener firmado las condiciones de venta y servicio.

 A la hora de montar una empresa está prohibido soñar. Es mejor ser pesimista con un punto de realismo, que ser un optimista sin información suficiente. Nada como preguntar, solicitar ayuda y consejos de amigos ajenos a la idea, de personas que nos pongan los problemas delante de nosotros, para que nos obligue a pensar. Pero no olvidar que la decisión la tenemos que tomar nosotros, que al final seremos siempre los mejores consejeros.

 Recuerda que muchas ideas que funcionan bien, son simplemente ideas ya conocidas con anterioridad a las que les ponemos nuestra personal modificación para convertirla en nueva. Nosotros somos capaces de conocer muy bien un producto y saber modificarlo y adaptarlo a nuevos clientes, nuevas necesidades, nuevo segmento del mercado. Si algo funciona, puede ser la base de algo que trasformado puede seguir funcionando. Depende de la idea de transformación, de la seriedad y conocimiento que tengamos del producto y del mercado al que está enfocado.

La razón de los que no quieren utilizar sus razones

Pensar que he sido capaz de poner una imagen del periódico La Razón para ilustrar una entrada en mi blog, me cuesta. Pero no tanto como tomar la decisión de que es fundamental ser sincero. Al menos alguna vez ¿no?

Yo también he detectado en Zaragoza que la gente tiende a quedarse en su casa o en los parques, que le importa un pito mostrar su preocupación o su rechazo a una reforma laboral que es muy lesiva para los intereses de los trabajadores. De ellos, de todos nosotros; pero que parece que les importa con muy poca razón, con muy poca atención.

Efectivamente España está sufriendo, pero eso no quiere decir que las soluciones pasen por cargar sobre los trabajadores los problemas que tenemos todos ni mucho menos además que la soluciones salgan de una reforma laboral de este gran calado. Los culpables de la crisis se están frotando las manos, pues están saliendo de rositas pero eso si, con más beneficios y con suficientes ayudas para seguir disimulando.

Pero está claro que esto es lo de menos. Que la sociedad pasa totalmente de este asunto, también de este asunto, y que eso sí, sabemos quejarnos en pequeño comité, sea en el bar, en las reuniones de amigos o en la hora del almuerzo envuelto en periódico o papel aluminio.

La huelga va a ser un fracaso. Los sindicatos tienen la obligación de plantear una huelga general pero deberían haber estudiado otras fórmulas. Tienen miedo a fracasar y se nota. Saben que tras el 29 de marzo los ataques a su labor puedes ser brutales, pero no tenían otras soluciones a mano. España camina hacia un fracaso más, sin soluciones a sus problemas reales y el empobrecimiento social y real durará unas décadas complicadas de delimitar. Pero que no nos quepa duda —bueno, podemos seguir escondiendo la cabeza entre las alas— nosotros también tenemos la culpa de todo esto. Yo también.

11.3.12

Seis razones para pensar que la Reforma Laboral es muy buena

Si tengo a mi alrededor 110.000 personas desempleadas y cuando se convoca una manifestación que les afecta totalmente en su futuro a todas la persona que sufren el paro, y tras recontar a mi modo observo que acuden 2.000 personas entre 700.000 habitantes a una manifestación contra la Reforma Laboral, algo me está fallando en mis neuronas. 

 O no es cierto que las reformas sobre las reformas laborales de las contrarreformas, afecten negativamente a los trabajadores.
 O no es cierto que tengamos en Aragón 110.000 personas sin empleo.
 O no es cierto que la inmensa mayoría de las personas con las que me cruzo en mis paseos sean trabajadores por cuenta ajena.
 O no es cierto que los domingos a las 12 la mayoría de la gente no acuda a misa.
 O no es cierto que a principios de marzo la sociedad todavía no se haya escapado a la playa.
 O no es cierto que yo sepa contar y además mi imbecilidad vaya en aumento.

Con sinceridad, mira, entre tú y yo y sin decirlo en voz alta. Nos merecemos lo que tenemos. Pero simplemente por dos motivos. O por que no es tan malo. O por que nos gusta tenerlo y asumirlo.
O tal vez por que nos pensamos que somos una poca cosa sin futuro ni sentido y que tras 35 años de democracia no hemos —entre todos— logrado que la gente crea que es posible conseguir lo que la sociedad se propone con razón. Me rindo en este asunto. Ya no volveré a manifestarme contra la reforma laboral. Me han ganado desde el Opus y desde el PP. Pero el éxito no es de ellos, el logro es de los muchos miles de trabajadores que hoy han preferido quedarse al sol, mirando como la primavera les llenaba “su” vida de luces nuevas pero grises. 

Aconsejo esperar a que nos llamen a la puerta, para intentar salvarles de los demonios, antes de ofrecernos como salvadores de la nada, pues como siempre, nos quedamos solos, o cuatro gatos cada vez más ajados y menos jóvenes. Así no lograremos nunca cazar ratones.

10.3.12

Ante un problema grave dentro de una organización, qué debemos hacer?

Muchas veces determinamos que tenemos un problema, que hay que resolver una situación anómala, pero en cambio no somos capaces de tomar las decisiones pertinentes por no saber actuar contra ella o por miedo a producir fricciones dentro del grupo. Incluso creemos que NO hacer nada es mejor y que el tiempo será capaz de resolver por sí solo el problema.

Diagnosticamos bien, pero no sabemos resolver, poner tratamiento o medicar la problemática.

Lo fundamental es definir la situación que supone un peligro, un problema al grupo, a la empresa, a la producción, a la atención, a la calidad, al sistema productivo. 

Definir el problema con claridad, a quien afecta, qué zonas están afectadas, en qué secciones se produce, en qué momentos.

Hay que sintetizar el problema, describiéndolo con claridad por escrito, para que así lo veamos desde otro punto de vista. No es lo mismo lo que pensamos cada uno, que lo que somos capaces de explicar por escrito, y en caso de falta de tiempo, al menos oralmente.

A continuación hay que escuchar con empatía las explicaciones de cada persona implicada, tanto los que definen la situaciones anómalas, como los que las explican o las justifican. De todas estas escuchas tiene que salir la solución. No buscamos culpables (todavía) pues buscamos soluciones.

Hay que determinar el grado de preparación de cada elemento que interviene en el problema. Analizar si es necesario preparar más y mejor a las partes implicadas y hasta qué punto se puede resolver con más formación interna.

Hay que acordar finalmente un plan de acción contra la situación, asumida por todas las partes implicadas y por la dirección del equipo y/o de la empresa y, empezar a trabajar en los cambios, en las soluciones.

El plan de acción también debe quedar por escrito y con la firma de todos los implicados, en donde podrán poner sus alegaciones. 

No es necesario que estén todos de acuerdo, pero si que todos lo hayan entendido y lo asuman como necesario al ser aprobado por la mayor parte del equipo de gestión, bien por número, bien por poder del grupo que dirige. 

Siempre es mucho mejor en estos caso no tener que imponer normas, sino que los planes de acción sean consensuados y asumidos por todas las partes de buen grado. La meta es resolver la situación.