13.4.15

Extremadura 15 - y llegamos al hotel a dormir

En el Hotel Velada Mérida vamos a tener nuestro punto de encuentro, de dormitorio, de medio pensionistas con derecho a televisión. Ayer ni la pusimos para no despertarnos del cansancio que ya acumulábamos. Y solo hemos empezado el viaje, jope. Es un hotel de cuatro estrellas según la puerta, pero la cena de anoche era de dos tirando a pasada de cocción. Nada hay que joda más cuando viajas que sentir que te tratan como en un cuartel de infantería. Huevos pasados de minutos, lenguado de mentira pasado de cocción y unas natillas de café que casi salvaron la cena pues sin duda eran lo mejor. Ahora y casi recuperados de las horas de autobús hemos tenido el primer encontronazo con el hotel. Todos tenía os que bajar a desayunar a la vez, en tropel, haciendo fila en el buffet esperando a que lo abrieran a las 8. Una idiotez supina. El resto de clientes podían entrar desde las 7,30 pero los de la mili no, había que esperar. Y eso supone 55 adultos intentando coger zumo de naranja todos a tropel, 55 medio pensionistas deseando tortilla de patata antes de que vuele. La variedad de las viandas bien, la calidad..., hoy hace buen sol, si.

12.4.15

Extremadura 14 - Aragón también sale perdiendo

A diferencia de lo que pensamos desde Aragón, gran parte de Extremadura es tierra de regadío con una producción muy alta de arroz (la segunda de España detrás de Andalucía y por delante de Valencia), tabaco (la mayor de Europa), espárragos, tomate pera, maíz, vino o frutales. Los grandes trabajos para dominar el agua, conservarla y trasladarla por grandes extensiones ha propiciado que sea excelentes tierras para garbanzos, judías verdes o todo tipo de legumbres, en las decenas de localidades de repoblación que fueron aumentando la población de Extremadura en los años 50. Casi 60 nuevas localidades que lograron convertir tierras de secano en campos de regadío para frutales o arroz. Unido a su ganadería y a la explotación parcial del corcho convierten a Extremadura en granero al que le faltan industrias transformadoras de muchos de los productos que ellos mismos producen. Es posible que sea territorio al que haya que acercarse para aprender y copiar, muy alejado de algunos estereotipos anticuados que algunos teníamos de Extremadura. Como ejemplo el Gobierno de Extremadura ha creado 120 km de autovías en su territorio mientras que el Gobierno de Aragón ha construido..., en fin.

Extremadura 13 - aparentar siempre está muy feo

Medio autobús estamos con la garganta hecha unos zorros, deben ser las fechas, lo que no nos impide hablar como tontos prepotentes. Cuando salimos de casa, si no lo hacemos todos los meses, a veces, nos salimos del cuenco y nos dejamos notar. Lo digo porque nada resulta más absurdo que aparentar en un lugar en donde los que acuden ya vienen aparentados de casa. A los viajes de abueletes debemos venir sin mucha furrufalla, con poco oro del grueso y menos si es nuevo y brillante, mejor con vaqueros que con modelitos de corte y confección y sobre todo con la boca dispuesta a escuchar y las orejas a mirar bien como si fueran antenas.  Si al primer día ya vas diciendo apariencias tontas, los de enfrente a tu mesa se quedan como convencidos de que eres tonto o tonta de baba. Y tampoco es eso. Es el primer día.

Extremadura 12 - comida típica extremeña

La primera comida en tierras extremeñas ha sido de las que se dicen típicas en Guadalupe, aunque servido con poca gracia y pero profesionalidad en sala. El precio era muy bajo y se notaba. El vino es una de las penas, a granel es de esos a los que no se les debe añadir gaseosa para no estropear la Pitusa. Pero al menos estaba fresco. El primer plato era una migas extremeñas que son unas migas con sebo acompañadas de medio pimiento rojo asado y unas carnes de puchero, de adobe. Chorizo regular junto a un poco de lomo y una costilleja de cerdo. El resultado muy aceptable. Para segundo una caldereta de cordero con patatas. El cordero es casi mayor pero muy bien cocido y excelente de sabor y textura aunque no en mucha cantidad. Lo que no estaba bien eran las patatas que simplemente eran fritas y añadidas encima, aunque al menos no eran congeladas. El orégano le entrega un sabor potente junto a algunas otras especies pero sin duda el truco está en machacar con ajo unos buenos trozos de hígado del cordero hasta hacer un majado espeso junto a un pimiento morrón y algo de pimentón. Este majado añadido a la hora de cocer la carne es el que le entrega el sabor potente.