23.11.15

Cinco ideas fuerza para tener ideas propias

¿Quieres tener ideas nuevas para tu negocio o proyecto? Vamos a intentarlo entre los dos con cinco ideas fuerza, simples pero prácticas.

1/ Ten muy claro cual es el objetivo que preparas, qué buscas, qué deseas obtener. Apúntalo con detalles en una hoja en blanco y míralo fijamente hasta aprenderlo de memoria. Es tu meta.

2/ Intenta que sea un proyecto práctico, que te sirva, que siendo simple permite ser ampliado en busca de la complejidad y la excelencia.

3/ Explóralo, míralo desde todos los puntos de vista posibles, apunta lo que te imaginas desde otras ópticas, mira las diferencias y búscalas al observar el proyecto desde los diferentes puntos de vista diferentes.

4/ Copia. No tengas miedo en copiar lo que hacen otros. Nunca se copia nada con exactitud. Siempre se modifica lo que se aprende, hasta adaptarlo a tus propios puntos de vista.

5/ Limita los tiempos que vas a dedicar a cada fase de desarrollo del proyecto. Puede que no seas capaz de crear nada nuevo, por eso si te marcas tiempos, te darás cuenta en qué momento debes abandonar o volver a empezar.

22.11.15

¿Quien facilita las economías del Estado Islámico?

Imagen de la web de RTVE
La gran diferencia del Estado Islámico con cualquier otro grupo terrorista hasta el momento, es que en esta ocasión y con la formación de lo que ellos denominan “El Califato” tiene su propio territorio, aunque no esté perfectamente delimitado. Zonas de influencia sobre las que gobierna en realidad y desde donde logran organizarse y reordenar sus finanzas.

Uno de los puntos clave para entender la fuerza que pueda tener EI en este momento es hacernos una idea de su potencial económico del que muchos dudaban hasta hace bien poco. Poseer territorio les sirve para organizar presupuestos propios que emplean para el terror.

Se calcula que tienen al año entre 400 y 650 millones de euro con la venta del petróleo que sacan de la zonas que ocupan. Algunos gobiernos lo están comprando y pagando. Otros 400 millones de euros logran vendiendo el gas natural con similares dudas. Entre 350 y 500 millones de euros logran a través de los impuestos y permisos de actividad que cobran a todos los habitantes de los territorios que controlan. Otro 300 millones de euros se calcula que obtienen vendiendo fosfatos. Unos 250 millones vendiendo cemento. Otros 250 millones vendiendo cereales y para finalizar otros 100 millones de euros con los secuestros que logran convertir en rescates. Unos 2.200 millones de euros al año, que emplean en sus actividades terroristas para comprar armas y municiones, pero también para pagar a sus militantes militares.

Si unimos a todos esto las cantidades logradas tras apoderarse de bancos en sus batallas, los envíos que reciben desde diferentes países desde gentes que les apoyan con grandes donativos o incluso con las ventas de objetos arqueológicos, entenderemos mejor que las mafias que rodean a todo este barullo violento es una maquinaria que hay que controlar más en los campos económicos que en los de bombardear edificios civiles o ciudades donde presuntamente se esconden. ¿Quien es capaz de tener todo esta maquinaria de compra y venta internacional, sin la ayuda de otros países que están en silencio, o de organizaciones con un poder tremendo para comprar y vender todo tipo de materiales y producciones? Lo curioso es que en realidad no sabemos quien consume finalmente los cereales, el cemento, el gas o el petróleo de un Califato extraño pero cada vez más potente.

21.11.15

La diferencia entre PP y Ciudadanos, según una naranja

A veces nos llegan a todos imágenes desde las redes sociales que resultan simpáticas o críticas, con mensajes realmente muy buscados. En muchas de ellas además buscan nuestra sonrisa de aseveración, lo que no siempre logran.

Esta vez la originalidad prima por encima de todo análisis. Puede tener razón el mensaje, no lo dudo, pero sobre todo me encanta la idea de que en caso de pudrirse lo naranja se vaya convirtiendo en azul. Yo soy de los que creen que el naranja es la consecuencia de haberse podrido el azul, sino más bien al revés, pero esa es otra.

Desconfiar de quien ofrece para España un futuro a corto plazo maravilloso

Es muy normal que yo el primero acuse a los empresarios de gran parte de los males que afectan a España. Y todos, yo también el primero, nos imaginamos a los empresarios con la cara de nuestro particular jefe o con la del taller de al lado o la del dueño de una empresa de nuestro barrio.

Desgraciadamente la inmensa mayoría de “los jefes” que realmente han destrozado España no tienen cara ni apellidos. Los pequeños empresarios han realizado errores, sin duda, pero sobre todo han tenido que trabajar en un mercado productivo para el que no estaban siempre bien preparados y con unos condicionantes complicados. Sin duda se han rodeado de aquellos asesores que mejor les han defendido sus intereses, pero los culpables de todo este desastre laboral y económico de España son otros muchos actores que se nos olvida nombrar.

Los banqueros, sin duda han organizado todo un trapo de enormes consecuencias negativas, que tardaremos muchos años en resolver. Por entrar en parcelas económicas que no les correspondía y por manipular jugando en el laboratorio económico que sólo se sustentaba sobre los papeles de los asesores de parte.