14.3.25

No queremos hablar del COVID


En general, en España no queremos hablar de lo que sucedió en el año 2020 en todo el mundo, pues intentamos olvidar siempre lo malo. Y lo del COVID fue una patada en los riñones de toda la sociedad, y sin saber todavía los motivos reales de su inicio.

Hay demasiadas cosas que no sabemos, pero ya nos da igual. Hubo excesivos errores sociales que nos marcaron y que cinco años después algunos de esos fallos, todavía arrastramos. Y nos da igual.

Hablamos mucho de las barbaridades que sucedieron en las Residencias de Ancianos, tremendo y en parte todavía oculto. Pero cerrar los colegios y universidades tanto tiempo fue un gran error que todavía pasa factura. 

Centrarnos demasiado tiempo en el contacto como medio de contagio, cuando era un virus que se propagaba por el aire, costó contagios mantenidos, y soluciones que no se tomaron en su momento.

Alrededor del COVID surgieron sin darnos cuenta, excesivos jetas y ladrones, chupópteros del negocio fácil, gentes sin escrúpulos que no miraban los muertos diarios. Hoy se esconden. La Justicia es muy lenta.

En Sanidad surgieron dos tipos de profesionales. Los que dieron el 200% de lo que podían, hasta caer en la extenuación y el agotamiento, y los que se empezaron a esconder detrás de trucos y tratos. Y eso queda mal decirlo, pero es verdad pues lo viví desde dentro. Si miramos algunas estadísticas lo entenderíamos mejor.

Es cierto que el miedo es incontrolable, y que cuando estás dentro de ese miedo no debe ser criticado el que te inunde. Yo no lo critico. Simplemente lo pongo sobre la mesa. 

Pero nuestro Sistema Sanitario, de los mejores del mundo sin duda, pero que arrastraba desde hacía años un déficit de futuro, empezó a resquebrajarse. 

Hoy, cinco años después del COVID no somos mejores. Hemos perdido valores y no hemos ganado ninguno. Nuestra economía micro y macro se ha movido y no para mejor. Hemos perdido parte del valor que tenía la escuela entre los jóvenes. Perdimos a un gran número de personas ancianas y débiles en una soledad que nunca se merece nadie.

Pero curiosamente ni las Residencias de Ancianos han mejorado, ni lo ha hecho la Sanidad, ni somos más felices tras aprender de nuestra fragilidad, ni entendimos bien lo que había sucedido. 

Hay teorías que se mantienen en el tiempo sobre el inicio del COVID, todas apuntan a una ciudad en concreto, incluso a una serie de ejercicios nunca desmentidos. No debieron ser los murciélagos ni los pangolines, casi seguro que fueron los humanos, según análisis bien secretos hechos en varios países y a veces publicados a medias. 

Y eso se podría volver a repetir, lo que es muy grave mientras no seamos capaces de controlarlo y de conocerlo al menos.

12.3.25

Para qué sirve la OTAN a partir de este 2025


En la izquierda a la izquierda del PSOE tenemos la gran duda (algunos, es verdad, no todos) de qué opinar sobre el aumento de gastos en Defensa por y para Europa. 

Voy a intentar aclararme yo mismo.

Durante décadas hemos admitido que los EEUU nos entregaran a Europa dinero o armas propias, para Defensa o para Guerras, o para Violencias de variado tipo; y no nos ha parecido especialmente mal. Lo hemos admitido. Ahora nos jode que nos lo hayan suprimido. 

Los EEUU de Donald han decidido cortar el grifo, aunque ya veremos pues cambia como las tormentas, y Europa debe plantearse qué debe hacer para defender a Ucrania y para otorgarnos una seguridad de Europa ante Rusia y en la zona del Norte de África, que antes la amparaban desde EEUU.

¿Defensa o Seguridad? 

Esa es la gran cuestión que nos plantean como un marco mental que busca liarnos. Todos tenemos claro que queremos seguridad. Pero no queremos más gastos en Defensa pues eso supone aceptar que son más dinero para armarse, para las violencias de unos contra otros. Para matar.

La Seguridad la quiero para mi familia en este orden, luego para mis vecinos españoles y después para los colegas europeos. Bien. Está claro. 

¿Alguien tiene duda de que desde España llevamos tres años aumentando los gastos de Defensa de forma encubierta?

Desde febrero de 2022 España como casi todos los países europeos han tenido que aportar ayuda de muy variado tipo a Ucrania. Y eso son costes asociados a la Guerra.

Cuando desde Zaragoza salen tanques hacia Ucrania, eso es gasto aunque fueran máquinas de matar que ya estaban retiradas. Y se pueden contabilizar además de muy variado modo. También son gastos cuando desde la Base aérea militar salen aviones de muy variado uso.

Cuando una planta del Hospital Militar de Zaragoza se dedica a atender a heridos de Ucrania, estamos haciendo una gran labor social, que cuesta dinero. De muy diferente forma, incluida la traída de familiares para poderlos visitar. Como es lógico y humano.

Es decir, contar los Presupuestos que se tienen que aplicar a los gastos de Defensa es muy relativo. 

Sucede de forma similar cuando pedimos que se dedique el 25% del Presupuesto de Sanidad a la Atención Primaria. Según como lo contemos nos podemos mover entre el 12% y el 27%. Para eso está la contabilidad. Y no es broma esto.

Europa necesita reflexionar, replantearse muchas cosas, y no ya para el día a día, sino de cara al futuro, pues esto que nos sucede ahora se mantendrá y cambiará el paradigma por décadas. 

¿Para qué sirve la OTAN a partir de este 2025?

Y ante esa pregunta nos tendremos que responder. También el PP, y Sumar, y Podemos, y CHA o IU.  No será sencillo responder, pues nadie sabe qué va a ir sucediendo en los próximos meses. 

Y lo seguro es que Europa, el resto de países europeos, nos miran con atención.