17.8.06

Miradas enigmáticas que penetran

Hay miradas enigmáticas, miradas que penetran, que dejan huella dentro de quien la recibe. Hay miradas de amor y de odio, pero también de búsqueda de compasión y de ayuda. Las hay que no pueden mantener la mirada y las hay desafiantes.

Pero también hay miradas artísticas y gratuitas.
En el Barrio de Las Fuentes de Zaragoza encontré esta pero no tenía piernas. Tampoco es que las necesitara mucho, porque así permanecía allí más tiempo rodeada de ancianos que toman el sol recordando si pueden sus volados años.

Nunca quiso decirme cómo se llamaba.

16.8.06

Formación Profesional, debe mejorar

Cuando alguna noticia no me convence, pienso que está maquillada…, debe ser la edad. Y en temas de Formación Profesional, apuntarse medallas cuando hay tanto trabajo por hacer me sabe muy malo.

Es cierto que se hacen cosas interesantes, que en algunas zonas de España se está funcionando mucho mejor que en otras (hasta donde yo sé Aragón no es de las más osadas en la implantación de nuevas actualizaciones curriculares) y que sobre todo los chavales del "fracaso escolar" lo tiene muy mal para encontrar trabajo y para poder crecer en formación, en sueldo y en seguridad.

Por eso me revuelvo con tristeza. Decir que los Ciclos Superiores están muy bien, dedicar muchas líneas a ellos y querer compararlos con la Universidad cuando en realidad empiezan en el mismo punto —con un Bachiller ya superado que ha funcionado como criba— es maquillar la verdad.

No escucho las mismas palabras de alegría con los Ciclos Medios, ni con todos los demás sistemas de adaptación escolar y laboral para jóvenes que se van quedando en el camino. 

No, no me digáis ahora que tal tema funciona muy bien, que yo lo sé, hablemos en general, con cifras generales. 

Hoy el trabajo está mal, los chavales salen de la escuela (incluidos los que hacen FP) sin preparación laboral suficiente (y digo suficiente porque mi corrector de estilo no permite poner otro adjetivo), y ponerse medallas supone dormirse en los laureles.

Hay mucho camino por recorrer, mucho por hacer si queremos compararnos con Europa.

La PAZ se construye queriendo la paz

Dicen los que son profesionales de la guerra, que la paz es un periodo que existe entre dos guerras. Un espacio vacío en "su" tiempo. Pero para los que nos hemos acostumbrado a vivir en paz (qué malos chicos somos), la guerra cuando les afecta a otros es simplemente un drama, y nunca queremos ni pensar lo que sería si nos afectara a nosotros.

Parece que hemos entrado en un periodo de posible calma, en una paz hilvanada con hilo fino y posiblemente delgado, en donde todos han ganado pero incomprensiblemente todos han sufrido cientos o miles de muertos. Personas como tú y como yo.

¿Les han preguntado a los que han perdido a sus hijos, a sus familias, sus puestos de trabajo y sus hogares, sus recuerdos y su pasado…, si han ganado o perdido? ¿Importa eso?

Lo curioso es que desde este mundo casi nadie ha mirado el mapa, pocos deseamos saber cual es la historia real de los conflictos por si se contagia algo, preferimos ver en la pantalla tonta las imágenes y a ser posible que sean suaves y fuera de la hora de la cena para no molestar. 

Nos da igual si los que mueren son unos u otros, porque muchos de nosotros pensamos que son como películas americanas de una tarde de verano. Pero creo que a ninguna le van a dar el Oscar. Somos con perdón, unos inútiles útiles, que simplemente miramos.

15.8.06

Acerca de…, nosotros

Usted desea saber más de nosotros, lo intuíamos, pues no se apure, se lo vamos a contar, faltaría más.

Somos gentes de Aragón, un país de esta España compleja pero a veces incluso acomplejada, que no es capaz de asumir que dos más dos pueden ser más que cuatro.

De un barrio de la márgen izquierda de una ciudad grande que sueña.

Uno de nosotros tiene más de cincuenta tacos pero el otro está de buen ver y no llega a la veintena, que es una edad medio loca, medio maravillosa.

Somos personas cabreadas, sarcásticas, duras como el sol de agosto, impresores y diseñadores, fotógrafos y economistas, cocineros y escritores, traductores de libros y poetas que no saben escribir, bebedores de Jack Daniel's y de combinados sin alcohol, políticos de variado pelaje y soñadores de vidas libres.

Somos viajeros de todo lo que se nos presenta a tiro, amigos de poca gente para nuestro gusto pero amigos profundos. Amantes de la paz y de la libertad, de la justicia y de las injusticias, porque entendemos que dentro de ellas hay personas que tal vez necesitan un abrazo, de lo que no se ve y de lo que no nos quieren enseñar.

Somos pequeños imbéciles que disfrutan escribiendo y desnudándose, gritando a ninguna parte, volando con los dedos y el teclado.

Somos tú, porque ahora nosotros somos la voz de cualquiera que también esté loco, estamos dentro de tu casa. No tengas miedo, nos iremos en cuanto tú quieras que nos vayamos.