17.3.07

La teoría de los círculos

Yo de pequeño, incluso de joven pequeño, pensé que el mundo se componía de almas que como círculos giraban en el espacio mental, y que a veces se encontraban con otros círculos por casualidad, otras veces se entremezclaban e incluso otras se pegaban (de adherir) y se quedaban miles de vueltas juntos.
Incluso llegué a pensar que esa teoría que me iba a salvar del mundo, la había descubierto yo.
Sigo pensando lo mismo pero en fino y depurado. Los años, que van haciendo estragos.

Ahora estoy en la posibilidad de encontrar un círculo nuevo que se cruce en mi camino y me vaya cortando en ciertos momentos, aportándome parte de sus circunstancias lo cual estoy seguro me enriquecerá. Somos tan débiles que dependemos de casualidades que no controlamos. Si este cruce de círculos funciona, y me enriquece en algo, será por tal cúmulo de casualidades que no podría explicar bien para que se entendiera, ya que me quedan unos 1.680 años para ser como Saramago.
Vosotros estáis en la misma tesitura. Dependéis de casualidades impredecibles e incontrolables. Luego ¿quejarse para qué sirve?, simplemente hay que esperar a que llegue el círculo y te roce. Eso si, que te pille trabajando para que te des cuenta y no lo dejes escapar sin darle un abrazo.

9.3.07

Queridos intelectuales;

Queridos intelectuales;
Espero que al recibo de esta están bien y con fuerzas, porque hace mucho que no les oigo gritar y eso me preocupa. Ustedes, gentes de todas las ideas políticas pero gentes aprendidas y conocedoras de las reacciones humanas, son personas que saben perfectamente lo que está sucediendo, lo que debe suceder y lo que no debería nunca de haberse salido del tarro de las esencias de la educación social para no revolver el avispero.
Por eso no les entiendo en su silencio, no les comprendo en su ensimismamiento, porque yo se que ustedes saben.
Yo entiendo que estén quemados, incluso que estén muy socarrados, es lógico además, pero incluso en esos casos, es su obligación dejar de lado sus calores y rescoldos y salir a dar la voz al aire porque es que si no, parece que sólo los que gritan mucho y confunden son los que tienen voz y razón.
Escuchaba el otro día al señor Herrero de Miñón, y se me caía la cara de pena, no lloré porque iba en el coche y soy muy mayor para hacer eso en los semáforos. ¿Cómo hemos perdido en pocos años la razón, el sendero, la suavidad, la elegancia, la paciencia, la sonrisa?
Miren, ustedes, que no me leen y que nunca me leerán, deben saber que están cometiendo un error por dejadez. Y la historia que es implacable con todos, los nombrará un día y les dirá que prefirieron seguir en su terraza del ático con su bourbon que bajar a Malasaña y ocupar otra vez la noche.
Un abrazo amigos, y si, lo se, ustedes no tienen ninguna obligación histórica de encabezar nada de nada, y que como ven la sociedad como la ven, prefieren quedarse haciendo barbacoa. Tienen incluso un poquito de razón. Pero con tanta razón que tienen, viene la Razón y ayuda en el barullo de las siglas y los nombres a prohibir las barbacoas porque hacen humo.
¡¡Coño!! colegas, piensen en sus nietos.
Mil besos.

Esperando el autobús

Están esperando los autobuses, y se les ve nerviosas, guardando fila aunque algunas exaltadas ya revolotean por encima queriendo salir cuanto antes a conquistar Madrid. Es lo que tiene saber volar, que te permiter ser tan libre que te crees por encima de todos los demás.
Yo estoy totalmente a favor de que nos manifestemos cuantas veces sea necesario e incluso que se haga en contra del Gobierno de turno. Es mi obligación (estar a favor) poque yo también lo hice en mis tiempos mozos, pero eso si, nunca tuve la suerte de que me acompañaran ministros, expresidentes, gentes de la tele, guaperas con traje y señoras mayores. Pero eso es lo que tiene haber nacido antes o después, que nunca se sabe. Bueno ahora que caigo, si que me acompañaban gentes de mal vivir, es cierto, solo que por aquel entonces ni ellos sabían que iban a ser importantes.
A mi lo que me da miedo en realidad es que después del sábado ya no queda nada. Y claro, como las mentes de los amigos del márketing y la publicidad son tan dadas a pensar, estoy seguro que para llamar la atención le darán vueltas a su cabeza. Como también yo toco el palo de la publicidad aunque de refilón, también he pensado.
Veamos.
Queda quemar cajeros. No, eso no que ya está patentado.
Quemar iglesias tampoco pega, excepto que sean protestantes o de las de altavoz a ciertas horas.
Quemar sindicatos no es de recibo ahora que están tan calmados. No.
Ya lo tengo, se podrían quemar barrios pobres, zonas degradadas y llenas de bichos, barrios asentados pero ya vacíos de gente autóctona, calles con grafitis que eso indica que no viven gente de fiar, ciudades enteras en donde ganas los traidores. Jope, la de adosados que podríamos construir después, ¿pero como no se nos había ocurrido antes?
El caso es divertirse y dejar nota en la historia.

8.3.07

Los autobuses del sábado

El próximo sábado será el día de los autobuses, el día en el que Madrid será una ciudad tomada y no se podrá comer en ningún sitio sin hacer fila, el día de la fiesta.
Yo recuerdo que de pequeño, cuando mandaba el general, las familias nos íbamos con la merienda cena de los domingos (los sábados trabajaban los pobres obreros de mis padres y mis tíos) al Cabezo que ya por entonces llamábamos así, sin saber que era pecado y había que decir Parque del Primo de la Ribera, que debía ser un primo que nació junto al Huerva y se hizo famoso por montar a caballo.
Pero íbamos andando y no en autobús.
Ahora como somos todos más finos celebramos los fines de semana en Madrid y nos vamos en autobús que debe ser muy guay.
Yo estuve el pasado fin de semana, pero como no soy obrero sino tonto, me fui en coche que es más caro y menos cómodo, sobre todo para mi que es quien conduce. Yo no soy obrero porque no me dejan los obreros, que conste en acta, que ya es joder a un pobre tipo como yo, pero así es la vida.
Pero a lo que iba.
Estos asientos de la foto, me lo han dicho gente seria donde las haya, se los han alquilado a los gitanillos de la puerta que casi no se ve por 500 euros el fin de semana, y es que se están quedando cortos de autobuses. Estos chicos finos donde los haya son capaces de no dejar autobús libre con tal de sumar, y me han dicho ya, porque los han contado antes de nada, que sumando este tipo de microautobuses sin motor en plan austero pero fino, que en Madrid habrá más de 3.000.000 de personas. Lo que no se sabe es cuantos irán al Museo del Jamón a comer el menú de 8 euros y cuantos a Casa Botín. Casi juraría que irán más al del Jamón, porque nada hay mejor para juntar a millones, que contar con los pobres que son más y además preguntan menos.