20.6.14

Habló el Rey y nosotros lo analizamos

Tras el “Discurso del Rey” tembloroso pero sin necesitar de terapeuta como en la película, toca analizar el texto del nuevo Rey con la calma necesaria para un texto que sin duda es importante.

Ha insistido mucho en el texto de “Rey Constitucional” y suena bonito aunque esconde algo más. Nada es en un texto de estas características casual sino causal. Como muy bien dijo Pablo Iglesias al jurar la Constitución: "Hasta que esta cambie por otra". Que el Rey insista en que es—y quiere remarcar— un Rey Constitucional está bien. Con la Constitución de hoy y con la que tuviera que venir mañana. Sin leyes un Estado, una sociedad, no puede funcionar. Pero para que funcione tiene que tener mecanismos de cambio y de recambio. Y tienen que ser leyes aceptadas por la inmensa mayoría.

El discurso fue sencillo, tocó todo lo que debía señalar, pero sin profundizar en nada, que no es que se pida pero que tal vez en algunos temas podría (debería) haber incidido algo más. La situación en la que llega no es buena y aunque marcó camino con la modernidad y el cambio generacional ampliamente referenciados, un camino nuevo de palabra, son simples brochazos en bruto, que cada uno escuchamos como queremos.

19.6.14

Emplear la primera persona en comunicación. También en política

Me llegó una publicidad de un Banco a mi casa, un folletito pequeño pero muy indicativo del idioma que se emplea ahora para vender. Y ahora con perdón mezclo productos como si esto feura un mercadillo. Para vender productos, ideas, proyectos, labores, equipos. No podemos permanecer alejados de los idiomas que en cada momentos histórico y social se emplean y se diseñan como más eficaces.

Emplea el folletito la primera persona con astucia. No nos conocemos mucho, pero saben que a veces soy cliente y por eso se atreven a usar la primera persona coloquial. Es decir, más o menos lo que todos podríamos hacer en política con nuestros afiliados, simpatizantes y votantes. Con todos convivimos, con todos nos tratamos para intercambiar emociones y deseos. Pero continuemos con el folleto.

Tu día a día.
Tus ilusiones y proyectos.
Reforma tu casa.
Tú tienes crédito.
Si tu confías en tu banco, tu banco también confía en ti.
Queremos ser tu banco.
Acércate a tu oficina.
Ven solo con tu DNI

Realmente les importas como negocio, pero saben que hoy solo desde la confianza, desde la cercanía serán capaces de llegar a ti. En muchos casos se nota la treta, pero en otros no. Para que alguien se fíe de alguien se necesita un idioma gestual y verbal, escrito u oral que valore a quien lo escucha o lee. Y nada como la primera persona coloquial para facilitarles las cosas. Imaginemos otras opciones. Efectivamente su eficacia es tremendamente muy inferior. Y efectivamente son solo frases, pero que están diseñadas para llegar dentro, para abrir miradas. Es la personalización del mensaje. Leamos los ejemplos.

Su día a día.
Sus ilusiones y proyectos.
Reforme su casa.
Usted tienes crédito.
Si usted confías en su banco, su banco también confía en usted
Queremos ser su banco.
Acérquese a su oficina.
Vengo solo con su DNI

Vuestro día a día.
Vuestras ilusiones y proyectos.
Reformamos vuestras casa.
Vosotros tenéis crédito.
Si vosotros confiáis en vuestro banco, este también confiará en vosotros.
Queremos ser vuestro banco.
Acércate a la oficina más cercana.
Venir solo con vuestro DNI

Si además quien te quiere vender una idea, quien te quiere pedir tu voto o tu atención, hace otras dos cosas más, sin duda el éxito es mayor.
A/ Dirigirse a ti por tu nombre, algo muy caro pero posible.
B/ Solicitarte y dar la oportunidad de que contactes con el remitente para lo que quieras, respondiendo siempre y dejando muy claro de qué temas puedes solicitar apoyo para no defraudar.

Felipe V de Aragón tiene todo por ganar. Ese es el reto de su discurso

Aparcada la República para otros años, nos toca escuchar con detenimiento el discurso de investidura de Felipe V de Aragón, para encontrar entre líneas las pinceladas suaves de su futuro reinado. 

Sabe que es un discurso que se mirará con lupa, que será el primer marco de su reinado, que tan importante será lo que diga como lo que no diga. Los gestos, las formas, los detalles van a importar y mucho, pues la repetición no sirve más que para hundir lo que nace. España necesita novedades, cambios, luz y confianza, liderazgo y capacidad.

Si algo tiene de activo importante el nuevo Rey Felipe VI o V es que representa la ilusión de lo nuevo, cuando todo lo que conocemos es arcaico y apagado, gris y sin capacidad. Es el nuevo siglo, pero sobre todo es el nuevo Régimen en España y con todo ello debe estar las nuevas formas, la nueva economía, la nueva cultura, la nueva sociedad. Eso o será la vieja. De él depende que no se añore la República, de forma imparable pues no estamos en tiempos de aguantar mucho la incapacidad.

16.6.14

Dudas ante la Monarquía que viene y ante la República que no sabe nacer bien

A pocos días de recambiar al Rey Juan Carlos por su Hijo —tal vez Felipe VI— siguen las grandes dudas sobre el todo y los todos. No logran ser claros, todo se viste de color rosa, de escondidas intenciones, de decisiones que parece equivocadas. Pero no sabemos los motivos reales de cada movimiento de piezas.

No sabemos por qué realmente ha abdicado el Rey. No nos convencen las anunciadas posibilidades por muchos motivos. De ser cierto que en enero ya lo sabían muchos, no tiene sentido que nos engañara en el discurso de Fin de Año, se podría haber callado; u otro tanto a los militares en la Pascua Militar, guardando silencio sobre un tema del que nadie le preguntaba directamente.
Tampoco sabemos por qué no acude a la Proclamación de su hijo como Rey. No nos encaja la excusa de que así no le resta protagonismo. En un acto así le puedes restar o le puedes dar más fuerza al nuevo Rey, dependiendo de tus gestos.
Me molesta sobremanera que el nuevo Rey acuda a jurar a la Proclamación vestido de Capitán General de Tierra. No lo entiendo y creo que es un inmenso error.
No acepto que se hable antes de Jurar el recambio sobre privilegios de miembros de la Familia Real, de los estados legales de los Reyes padres, etc. Eso sobra del debate, ahora no toca.

Pero por otra parte me molestan los fondos del iniciado debate sobre la República que se ha intentado montar sin sentido y con presencia en las calles, aunque nunca con suficiente calidad. Quien habla de República debe saber —y así lo he intentado plasmar en algunas notas o entradas en blog— que hay muchas formas de República posible y que antes de hablar en abstracto hay que sentarse a analizar qué tipo de República queremos para una posible o imposible España. Está bien pedir libertad, República o educación en abstracto por parte de la gente de la calle, pero los que están en los despachos y tienen la obligación de diseñar el futuro deben hablar de algo más que de una palabra, deben diseñar aunque sea con pinceladas gruesas, qué República creen que es válida para España. Y este debate no se ha abierto ni se ven apuntes de que se vaya a realizar. Hoy la sociedad ya no admite más políticas en abstracto. Si queremos que la gente se integre en las sociedades desde la participación hay que hacer pedagogía y entregar a cambio información real y sinceridad.