10.10.20

Secuelas de los enfermos de COVID-19


Las secuelas de la pandemia son más amplias que la propia enfermedad
superada o no, pues las secuelas duran mucho tiempo al ser una enfermedad que no podemos atajar sino si acaso mitigar los síntomas o no dejar que estos nos afecten mortalmente.

Ya sabemos que al lado de la propia COVID tenemos ya entre la población problemas psicológicos y laborales o económicos, pero no me quiero referir a ellos en esta ocasión, sino a las propias secuelas de los que han sufrido la enfermedad. Problemas que se siguen tratando por los profesionales médicos durante semanas o meses.

Sabemos que sobre un 10% de los enfermos diagnosticados de COVID sufren secuelas importantes durante un mes tras ser dados de Alta o haber superado la enfermedad sin estar ingresados

Y algunos de ellos serán meses los que tendrán que invertir para volver a la situación anterior a su enfermedad

Pero entre los hospitalizados estos problemas los sufren entre el 50% y el 90% según el tiempo que han estado en el hospital o si han tenido que pasar o por no UCI.

Salir de la UCI cuesta semanas, pero que el cuerpo y la mente se olvide de su estancia en las zonas más peligrosas puede costar medio año para los problemas físicos. La edad y el mayor tiempo en la UCI complican la salida de estas situaciones que a veces se vuelven crónicas.

Falta aire al respirar, hay cansancio, dolores de cabeza, intolerancia al ejercicio físico, falta de oxígeno en sangre, debilidad muscular, problemas de memoria, miocarditis, insuficiencia renal, ansiedad, insomnio, irritabilidad, depresión, estrés postraumático, disfunción pulmonar, vértigos, angustias y fatigas en los casos más leves.

 


9.10.20

Con estas 3 cosas: calcetines, móvil y calzoncillos, todavía eres hombre.


En los hospitales… en cuanto entras es como cuando entrabas en la mili, lo primero es lo primero. Pijama abierto por detrás y silla de ruedas como poco. 

—Quítese toda la ropa y póngase esto— te dicen mientras por dentro sonríen sabiendo que te va a joder. —¿Y los zapatos?— preguntas de forma inconsciente, para intentar preservar algo de dignidad. 

Os juro que con un pijama azul cielo abierto por detrás y con calcetines y zapatos negros… quedas super respetable para entrar en el cielo. 

Yo no me quité el calzoncillo para disimular y escondí el teléfono móvil entre las dos manos. Pensé que con esas tres cosas: los calcetines, el móvil y los calzoncillos, todavía era hombre.

En cuanto me haga Ministro de Sanidad mando cambiar los pijamas azules por otros diseñador por Ágata Ruíz de la Prada y con velcro por detrás.

Consejo de una médico de urgencias a todos los pacientes


Ayer pasé el día en urgencia
por un cólico muy doloroso de piedras en el riñón. Todo bien al final, pero no vengo a hablar de mi. Sino de la atención recibida, de lo observado. 

La atención personal de las profesionales médicas y de enfermería fue de una excelencia y amabilidad, de un humanismo para agradecer aquí. En mi caso pasé por las manos de dos médicas, y de un total de unas 8 enfermeras por diversos motivos. En total… todo mujeres y jóvenes excepto en un caso de enfermería que sobresalía de la cuarentena. 

La saturación de Urgencia fue creciendo a la largo sobre todo de la tarde, pero con la mayor tranquilidad y sosiego posible fueron cambiando de sitio a los que estábamos en la zona de Hospital de Día, para hacer huecos, para buscar espacios casi imposibles, y sin que los enfermos se dieran casi cuenta. Y mientras tanto y por las largas horas de espera, sabían atender a cualquier petición incluso absurda, de todos los que allí estábamos.

Por la tarde la entrada de pacientes desde ambulancia fue en aumento hasta convertirse en algo casi constante. Y desde el Triaje todo funcionaba como un taller de reparación perfectamente engranado. Todos parecen tener una función asignada y el ambiente parece excelente, de cara al menos a los pacientes.

Faltan profesionales, no es bueno para los pacientes estar tantas horas en un hospital entre más enfermos, pues el riesgo aumenta y complica. Tampoco para los profesionales médicos y para la atención y diagnóstico.

Pero quiero añadir una petición unánime entre los que estamos dentro de un Sistema de Salud hoy herido y claramente desbordado por la falta de previsión e inversión. Va dirigidos a todos los ciudadanos. Me lo hizo llegar ayer la médica que me dió el Alta médica.

Por favor, acudir a los médicos, a las Urgencias, a los hospitales… ANTES. Se está detectando un número de pacientes que acuden a Sanidad más tarde que antes, con peores pronósticos, con peores futuros, con soluciones mucho más complejas y que dejan más secuelas. Sobre todo en ictus, corazón y problemas psicológicos que se convierten en psiquiátricos.

Vuelve el Teatro, vuelve la Cultura. ¿Aprenderemos a cuidarlo?


Tras casi un año… (¡¡Uff!!) el teatro ha vuelto a entrar en mi vida y yo he vuelto de espectador a una de las artes más antiguas. Con seguridad y con esperanza, con ganas y con ilusión ayer estuve viendo la obra musical "Jekyll y Hyde" en el Principal de Zaragoza. ¿Os hablo de la obra? Los artistas geniales, más si cantan en una fuerza y tono que asombran. Pero quiero destacar algo que no siempre valoramos en su punto.

La escenografía, el escenario, el sonido e iluminación, el cambio de ambiente es de Premio. Era el miércoles jornada de estreno en Zaragoza y algunos pequeños fallos se produjeron, lógicos ante un escenario nuevo. Pero el conjunto esta a la altura de los mejores locales del mundo, de los mejores musicales de las mejores ciudades.

Pero lo importante es que el teatro vuelve, la cultura vuelve, somos capaces de entender que además de los bares (que también forman parte de nuestra cultura) existen decenas de formas y de artes que debemos cuidar para no perder.