4.11.20

Llevar la Política a la Justicia es derrotar a la Política y demostrar incapacidad


Cuando llevamos la política al campo de la Justicia entretenemos a la Justicia y jodemos a la Política. Y sobre todo dejamos de ser políticos para convertirnos en tramposos. ¿Tramposos? Sí, pues las reglas de la política no se entienden en/con la Justicia, porque las normas de la política interna no se han fabricado nunca para que las gestionen desde la Justicia Interna. 

Siempre debe existir una Justicia que controle a la Política, eso sin duda, pero nunca para jugar a los cubiletes con ella, nunca para utilizarla en beneficio de quien llama a la puerta de la Justicia, a ver si cae el higo del árbol. 

Hay auténticos especialistas en retorcer las leyes y las normas, listos de libro que saben interpretar y que en la vida común se dedican con gran éxito a la abogacía, pero que en política son tachados de fontaneros para nada. 

Si además incluimos en esta diatriba a los que administran la Justicia, que se sienten embebidos de esa propia Justicia y ya no utilizan ni el sentido común ni la política, la vamos pifiando poco a poco. 

Pero hay algunas pequeñas cosas que debemos tener todos en cuenta. La Justicia está para todos, y una vez que se abre la puerta es muy difícil cerrarla, o lo que es lo mismo, quien la abre suele terminar también en manos de la propia Justicia a quien ha llamado. 

Es decir, el camino es siempre de doble recorrido, y la Política siempre pierde. 

Y me refiero a la Política Global, a la local e incluso a la interna de los Partidos Políticos. 

El tonto manipulado que cae en la trampa de recurrir a las Justicias Internas, debería sospechar que al final será él quien también termine ante los mismos mecanismos de Justicia Interna. 

Es decir, el caos, en estado puro, inexplicable a la sociedad que tiene muchos problemas y creyó en un pasado que los que habían decidido trabajar desde la Política, les iban a resolver alguna pizca de sus problemas. 

Y mientras tanto así nos va, observando el Populismo que crece mientras todos miramos hacia otro lado y nos reímos de los chistes hacia un Trump que vuelve a dominar el mundo. ¡Estamos tontos!

3.11.20

Comunicar con imágenes de palabras, para comprender el mensaje mejor


Decíamos antes que lo visual está triunfando en las presentaciones de ideas, de trabajos, de proyectos. Y es cierto… pero con matices. Una imagen es mucho más interpretable que una frase. Una imagen de un proyecto es más impactante, pero puede mal interpretarse, pues el espectador debe descifrarla, asumirla traducida según lo que él está viendo, que a veces no es lo que quien presenta quiere decir con exactitud. Y en los detalles puede estar el error.

Si la idea la describimos antes con un titular, unas pocas palabras, una frase bien elegida por quien presenta… estaremos condicionando a quien va a mirar las imágenes posteriores, para que las descifre en una dirección determinada. 

La idea siempre debe estar dentro de una buena frase, un titular, una descripción con pocas palabras, para preparar el camino de la explicación posterior.

Pero las palabras, los titulares, las frases "se ven" es decir, también entran por la vista, y eso es lo que hay que dominar. 

Trasladar la idea a explicaciones y palabras, convertir las palabras en ideas visuales, que sirvan para comunicar el proyecto. 

Se quedarán con las imágenes, pero para que las comprendan sin errores debemos acompañarlas de imágenes visuales "que sepan decir" lo que queremos, y lo más fácil para todos es que lleven dentro palabras o titulares elegidos por nosotros.


Las Grandes Ideas necesitan dos segundos de explicación y un titular


Estamos en tiempos de segundos, todo tiene que hacerse rápido, hay que escribir muy poco, hablar menos, comunicar con una frase. Si tu idea es buena debe poderse explicar en unos segundos. 

Si luego quieren más información ya te la pedirán. Lo primero es dejarlos con ganas de seguir sabiendo más.

Son tiempos de titulares, nos hemos convertidos en personas que leen dos líneas como mucho y de ellas hay que sacar la sustancia. 

Antes se estilaba el texto de un cuerpo 11, ahora ya nos tenemos que mover en un cuerpo de letra 14, para leerlo rápido.

Hay que llegar al corazón, debe entrar por los ojos y no por el pensamiento, somos ya seres visuales y sonoros, cada vez menos reflexivos. Y nos tenemos que adaptar a ello.

Si pretendemos explicar o hacer una presentación larga, con detalles de todo tipo, titubeante… y a veces aburrida, nos estamos equivocando. 

Si crees que es una Gran Idea, busca su titular y explícalo en medio segundo.

Bienestar emocional y Covid-19. Cómo defendernos

En estos tiempos en que se nos presenta una Segunda Ola de Covid-19, con un alto número de contagios, con estado de alarma, con toque de queda… la única enfermedad que sufre la sociedad no es el covid. NO.

Hay un trasfondo que va más allá.

Hablo de la incertidumbre, del miedo a perder el trabajo, pues muchos negocios cierran por falta de clientes, miedo a contraer la enfermedad, a no tener que comer, que hacer. Es pues un estado de inquietud constante.

Para que esta situación no afecte en exceso a nuestro bienestar emocional se recomiendan una serie de ideas, que podemos tener en cuenta.

 Mantén tus rutinas de siempre

 Adecua las comidas a unos horarios ya fijos y conocidos

 El sueño es necesario y reparador y debes descansar bien

 Realiza ejercicio físico diario incluso más que antes de la pandemia

 No estés todo el día delante de ordenadores o tablets

 Mantén una comunicación fluida con tus seres queridos (familia, amistades) e incluso con personas menos conocidas. Intenta hablar con quien no puedes ver en estos tiempos

 Únete a acciones comunitarias y ayuda a la sociedad

 Evita la sobre información que no sirve mas que para asustarte

 Cuida el consumo de redes sociales sobre todo las negativas y violentas verbalmente

He podido comprobar durante estos meses, (casi ocho desde que se declaró el estado de alarma y confinamiento domiciliario), la importancia de tener la mente distraída, lo necesarias que son las relaciones sociales, aunque sea a través de una videollamada para ver a esas personas importantes y saber que están bien.

Pero tengo especialmente claro que un exceso de información no beneficia al estado mental. 

Estar informados si, pero lo justo y preciso para saber un poco como está la situación, pero no es nada sano estar 24 horas al día hablando del mismo tema, pues la mente no descansa y se genera un mayor estado de rabia, inquietud, impotencia, ansiedad.

Y finalmente busca apoyo en la gente que te rodea o deja que te ayude un profesional si lo crees necesario.

             Laura Puente Ajovín