2.5.21

Pandemia (30) ¿La única solución es el Estado de Alarma?

Nuestra capacidad de autodefensa ante la pandemia del COVID19 es muy débil y podemos asegurar que a mayo de 2021, más de un año desde que el covid entró en España, nos está venciendo claramente la pandemia, con unas cifras de contagios casi mantenidas y otra de fallecidos que van sumándose sin doblegar del todo incluso ni los motivos de estos agravamientos en el estado de salud de ciertos colectivos que ya no son las personas muy mayores. No se trata de alarmar aunque lo parezca, sino de tomar decisiones que sirvan, para las actuales no están dando el resultado necesario para vencer al virus, excepto la vacunación que debería ser más rápida en todos los países pues la pandemia es global.

Pero además debemos reconocer que nuestra capacidad de reacción como sociedad es muy débil, sustentada en casi todos los casos en los confinamientos, en los frenos a las actividades básicas de los seres humanos. Y mientras pasa el tiempo, el virus se va adaptando poco a poco a nuestras débiles defensas y se crece y crea variables capaces de contagiar más como está sucediendo en India sin saber con seguridad los motivos.

La variable B117 o más conocida por la inglesa, está afectando descontroladamente a muchas más personas de todas las etnias, no solo aumentando su capacidad de contagios sino con una mayor letalidad y gravedad que se reconoce solo en documentos internos. Y a su vez han salido desde este finales de diciembre de 2020 —que es cuando se detectó la variante inglesa— al menos otras dos a tres variantes distintas que no son simples cambios leves del virus sino más importantes, y de los que todavía no hay estudios concluyentes.

De la variante inglesa había ya detectados unos 27.000 casos en 64 países a principio de febrero de 2021 y en este mayo ya es claramente la que domina los contagios en España en donde ya se han detectado algunos casos de la variante de India. 

Y se detectan también casos en menor grado de la variable sudafricana y brasileña. Es decir, se adapta el virus mientras que nuestra capacidad de vacunación es lenta y débil, con problemas añadidos de fabricación y distribución que logran una enorme diversidad de respuestas con vacunas según el país que analizamos, estando la Europa Unida en el pelotón de los torpes, muy detrás de los EEUU, Israel, Rusia, Reino Unido o China como países más importantes que llevan una gran delantera. Aunque hay que advertir que no en todos ellos la eficacia de sus vacunas es la mejor.

No hemos sido capaces de articular ningún tipo de defensa o de ataque contra el virus que no sea el confinamiento en mayor o menor grado. Llevamos muchos meses sin salir desde nuestros territorios hacia otras zonas de España como primera opción. Y las cifras de contagios no se doblegan.


Seguimos sin disponer de medicaciones contra el virus, antivirales
nuevos, dando esta batalla ya por perdida pues no se escuchan muchos intentos de investigar al respecto. No logramos que los contagios se controlen con medicaciones nuevas que al menos logren retrasar los contagios hasta que hubiera síntomas. Tampoco conocemos nada que sirva para mitigar el número de contagios admitiendo ahora, un año después, que los contagios por contacto son mínimos. Ya no es tan importante lavarse las manos o llevar guantes, como defenderse pasivamente contra loa aerosoles.

Se cierran actividades, otras no se pueden hacer presenciales, hay horarios de Toque de Queda. ¿Esta es la única o mejor manera de podernos defender contra los contagios? ¿Cuánto no sabemos del virus? ¿Sólo somos capaces de tomar medidas de confinamiento como métodos por descarte al no ser capaces de conocer mejores formas de frenar la pandemia?

La vacunación masiva parece la única solución temporal, pero mucho nos tememos que este virus no será tan sencillo de doblegar con unas vacunas como las actuales. Hay que seguir buscando mejor sistema de vacunación y defensa, y sobre todo hay que replantearse que la única solución no pasa por Estados de Alarma, pues no pueden ser eternos.

Un país con un Estado de Alarma eterno o inmenso, confinado por partes y con unos controles contra la libertad individual alejados de sus Leyes Máximas, no es un país de futuro. Y si es de presente, hay que trabajar de forma urgente por cambiar ese presente.

Julio M. Puente Mateo

1.5.21

Esas edades adultas en las que ya no eres como antes


A partir de ciertas edades adultas —para ser suaves y reales—, uno duda siempre si escribir o leer, si entregar o recibir, si soñar despierto o dejarse dormir con lo que otros te plantean. 

A ciertas edades uno ya está algo desaparecido, fantasma vivo que sabe que ya no es tan necesario, que no es que sobre, sino que nadie nota que falta. 

Se pierde el tren de la necesidad de los otros, tus espacios anteriores quedan ya ocupados y nadie se acuerda de tus tiempos. Tienes que ser tú… quien siga peleando por tenerlos, por creértelos o por creártelos. 

¡Qué hermosos verbos! Crear y Creer. Creártelos y Creértelos.

Son estos tiempos para escribir poco pues se lee menos, y de mirar más ya que cada día está todo más borroso. 

No hay más. Excepto que quieras moverte con menos color o con otros menesteres tremendamente distintos, artificialmente creados para sobrevivir.

He visto a Joaquín Sabina en una imagen mientras se ponía la vacuna. Es inmundo pues no es una imagen de este mundo. Yo quiero que me vean con bombín y no en camiseta y cara de miedo.

¿Por qué no respetamos más a los adultos excesivos si todos vamos hacia ello, siempre que tengamos suerte en el camino?

La domótica tiene sus problema. Cuidado que empieza mandando


Ayer en casa nos sucedió un episodio que podríamos calificar de parapsicología tecnológica. Hace un mes me compré una nueva televisión Samsung y ayer la muy jodida nos avisó con un mensaje en pantalla que hacía mucho tiempo que no utilizábamos el mando a distancia original y es cierto. Lo curioso es que si tuviera uno de esos aparatos que reconocen tu voz y admiten órdenes, me habría dicho la tele con su voz en grito que debo emplear más el mando. Ya ni en casa somos libres de hacer lo que nos venga en gana. 

Es cierto, compramos un mando NO oficial por sencillo y dejamos el oficial guardado en un cajón. Y la cabrona de la tele se ha dado cuenta de que no lo utilizamos. ¿Qué será lo siguiente? ¡Sabe diferenciar entre mandos! ¡La inteligencia no está en la tele (o si) sino en el mando.

Meter la domótica en casa puede ser peligroso y sin duda un atentado contra tu intimidad. 

—Señor Pichurri, hoy no se ha duchado, no hemos detectado consumo de agua

—Señor Pichurri, hoy todavía no ha ido a depositar "sus cositas" al WC. Haga fuerzas, por favor

—Señor Pichurri hace más de una semana que no come lentejas guisadas, que lo hemos detectado en su cocina

—Señor Pichurri, lleva muchos meses sin compañía y eso no es lógico. ¿Le busco a alguien? ¡Dígame el sexo que desea esta vez!


30.4.21

Pablo Iglesias quiere poner en marcha una nueva televisión. Lógico y necesario


Parece ser que Pablo Iglesias quiere abandonar la política y afianzar un medio de comunicación progresista o crear uno nuevo apoyándose de forma mutua en algunos Grupos que ya tienen periodismo digital progresista, como podría ser el caso de Público. Es una decisión lógica, válida y de defensa ante los tiempos que ahora corren. El poder es relativo, es líquido como es casi todo líquido en estos tiempo. 

Y lo que no es lógico es que la izquierda no tenga un medio de comunicación potente que sepa, pueda, quiera defender las ideas progresistas. NUNCA en la historia de España ha sucedido esto. Incluso en los últimos años del franquismo había medios progresistas incipientes que se atrevían con la censura. ¿Os recuerdo al Andalán?

Un Medio de Comunicación hoy ya no es un medio de papel, sino un Medio Digital, estático o no, televisivo y radiofónico, en internet y muy plural en sus contenidos y herramientas. Ya tenemos pues claramente diseñado el medio, la forma, los modos. 

Falta la chicha, es decir el dinero. 

No es posible soportar que hoy en España la única televisión libre para opinar lo que le venga en la real gana algo controlada sea Movistar, una televisión de pago y no dedicada precisamente a ser generalista. Sus pocos programas claramente televisivos son la única ventana libre que deja entrar algo de aire limpio, sin manipular. Y eso es tremendo para estos tiempos en España.

Hay luces en el panorama digital de estos momentos, hay ideas y proyectos que funcionan bien. Pero tienen que crecer y hacerse adultos, mayores, con más influencia. El ejemplo de diario.es tiene réplicas diversas, pero todas ellas son suaves y no pueden dar el salto importante.

Hay profesionales progresistas, reflexivos, necesarios. Los conocemos. Hay incluso otras formas de hacer televisión. 

Así que lo único que se necesita es rentabilidad del proyecto, apoyos, empujes. Y España tiene que salir de la actual basura social televisiva donde solo se tocan temas para tapar otros temas, donde algunos presentadores de máxima audiencia saltan mitines a las 9 de la mañana sin que nadie puede replicar desde otras ventanas. Eso es una democracia coja. España necesita calma, reflexión y sacar encima de la mesa los problemas de verdad, y no los manipulados por odio en defensa de familiares. La pluralidad es la garantía de la moderación o del estallido. Hay que jugársela si queremos que nuestra sociedad sobreviva.