30.1.09

La deflación se acerca. Últimos datos del IPC en España

De confirmarse esta caída de la inflacción, nos iríamos a datos del año 1969, con un 0,8% interanual. No es deflación pero se acerca.
Todavía hay un componente de energia muy alto en estos datos, no están bajando todos los precios, algunos se mantienen o suben ligeramente, y hay que esperar al menos otro trimestre para poder hablar de deflación.
De momento está claro que hay que volver a bajar los tipos de interés, que hay que inyectar confianza en los consumidores y que estos deben actuar con mesura e inteligencia a la hora de elegir el tipo de productos que consumen.
Ya, es mucho pedir, lo entiendo, pero si no se actúa coordinadamente en el mercado, el paro puede ser un lastre muy complicado de soportar.
Hay que ayudar a quien no puede y conseguir que quien si puede, consuma bienes que generen trabajo en nuestro país.

Debemos consumir MENOS de aquello que no producimos en la UE

Lo apuntaba la otra semana el ministro Sebastián, y muchos se reían de la recomendación. Ahora es el propio Gobierno de EEUU quien exige la medida de protección para las obras que se hacen con el dinero de todos.
Lógico.
En España cada euro que se gasta en consumo de productos fuera de la UE, es un euro que hay que recuperar con exportaciones o turismo.
Si no se recupera, se entra en desfase de la balanza de pagos con el exterior. Nos endeudamos de verdad de la total.
Cada vez que compramos un ordenador, un teléfono móvil, gasolina o vajamos a Cancún entramos en déficit.
¿Seremos capaces de compensar estos gastos?

Si en una familia un padre se gasta mil euros en un ordenador que fabrica su propio hijo, gasta menos de 1000 euros reales, pues el hijo obtiene un beneficio y da vida a la empresa, mejorando su posición en el mercado.
Si lo compra en otra tienda, gasta los mil euros y además la competencia a su hijo obtiene más beneficios lo que le separa en riqueza de su propio hijo.