3.6.24

La internacional fascista ya está entre nosotros. Y lo sabemos


Hace 10 días estuve en un mitin político en la frontera entre Rumanía y Ucrania del partido de extrema derecha y prorruso AUR. Se puede ver su programa electoral en internet y traducirlo al castellano. Interesante por lo que propone que no es más que algo similar de lo que se propone en el Suroeste de Europa.

Es interesante saber eso, por representar en su conjunto las mismas ideas y proyectos que se escuchan por España, Francia o Italia. Se han ido multiplicando los gérmenes. Y con las mismas ideas, aunque las sociedades sean tremendamente diferentes. Hablo en ese caso y lo repito, lo viví de la frontera con Ucrania, país en guerra con Rusia.

 Las mujeres están siendo coartadas en sus libertades por los partidos de izquierdas. La familia ha dejado de ser importante.

 El mundo rural, los ganaderos y agricultores están siendo vilipendiados por los urbanistas, que se quedan con todos sus beneficios.

 Europa está en contra de nosotros, no nos deja ser libres ni ser patriotas. Solo manda a favor de los Grandes. Nos quieren como esclavos.

 El mundo del trabajo está en manos de unas multinacionales ajenas a nuestro país, al que desconocen.

 Nos engañan con el cambio climático, no por sus efectos que también, sino por qué lo produce.

Podría seguir, pero es lo mismo que se dice por aquí y se puede consultar. Entre todos ellos —en la Europa que mira asombrada y casi sin preocuparse— se reparten las ideas, se comunican muy bien, se saben construir un mundo de bulos muy bien vendidos.

Había más guardaespaldas que público. Asistentes jóvenes en muchos casos, bien vestidos pues esperaban a su líder enfrente de unas murallas históricas. Hubo serios problemas en aquella tarde que no quiero relatar. 

Personalmente me asignaron a un guardaespaldas que me siguió en todo momento. Un tipo no muy alto, pero de anchas espaldas, más que suficiente para molerme si hubiera sido el caso. No lo fue, y pasó/pasé casi desapercibido excepto por el idioma y la cámara de fotos.

Escuchamos en todos los sitios de nuestros entornos que se nos avisa del auge de la extrema derecha, parece que se nos quiere decir que viene el lobo. Es falso. El lobo ya está entre nosotros, pues por torpezas propias hemos permitido que creciera. Torpezas de muchos, de casi todos incluido en España el propio PP, y lo saben. De las torpezas de la izquierda ya he hablado en otras ocasiones.

La Europa que se quiere desde esas nuevas organizaciones es bastante diferente a la que tenemos hoy. Disfrutemos mientras podamos. Si hay dudas sirve preguntar a Polonia. Y ver las dificultades para retraer algunas decisiones anteriores de esas extrema derecha muy bien alimentada siempre y en todos los países por grupos religiosos. Cuando ellos gobiernan se preocupan muy bien de dejar todo atado, y bien atado. Ya dijo eso mismo Francisco Franco (el general bajito) en 1975.

Otro ejemplo lo podemos observar en la herida y maltrecha Argentina, que con Milei va camino de un paquete de huelgas extensas que todavía va a empobrecer más el país que ha decidido elegir un Presidente cuando menos curioso. No se habla de eso.

Nuestro voto del día 9 de junio es poca cosa, pero puede ser más que suficiente para dar moral a los que se presentan, sean de la idea que sea. No es tan importante el voto como ser capaces de entender qué está sucediendo, qué está creciendo… en Europa como poco.

Son Ciclos, es cierto, pero de su potencia sí tenemos que dar cuenta nosotros a nuestros nietos. Sabemos qué quieren, sabemos qué sucederá, pues esos Ciclos como se repiten, lo hacen siempre de la misma manera. 

Así que nada, si no sabemos hacerlo mejor, al menos observemos todo sentados y con una cervecita. Pero luego no digamos que no se veía venir.

2.6.24

¿Cómo se fabrican los bulos? ¿Qué importancia tienen los bulos?


Los bulos, también conocidos como noticias falsas
pero sobre todo como desinformación o verdades a medias, tienen una importancia considerable en la sociedad actual, y su impacto puede ser muy negativo por diversos aspectos, resultado que no es menor dada la calidad con la que se fabrican esos bulos, el conocimiento que poco a poco van adquiriendo quien los fabrica, para que nos lleguen casi en forma de verdad.

La importancia del Bulo es que no parezca Bulo. 

Que una mentira o media verdad, aparezca como creíble, como cierta, como el inicio de una posible verdad. Diríamos que la primera norma es que un Bulo se lo crea incluso quien lo emite sabiendo que es mentira.

No se trata de construir Bulos de forma aleatoria, sin una escuela detrás. El éxito de un bulo es que NO sea una información falsa, sino una información interesada, a la que se le resta la parte que se desea obviar.

Se dice que la verdad es toda la verdad, y diciendo solo la verdad. 

Un bulo bien hecho es verdad, pero no le añadimos TODA la verdad, y además sí añadimos DETALLES sencillos que nos llevan a otro espacio de la verdad. 

Un Bulo tiene que ser sencillo de entender por todos los receptores. No hay que desentrañarlo ni esforzarse en entenderlo. Un buen Bulo es algo sencillo que una gran parte de la sociedad que lo recibe ya se dice a sí misma —¡¡Me lo imaginaba!!

No es mentira, pero tampoco es verdad. Y entonces funciona perfectamente.

¿Qué se consigue en el corto plazo, regando de Bulos la información que recibimos?

Erosión de la confianza pública: 
Los bulos pueden minar la confianza en las instituciones, en los medios de comunicación y en las figuras de autoridad de todo tipo, incluidas las que consienten los bulos. Cuando las personas se ven constantemente expuestas a información falsa, pueden comenzar a dudar de todo lo que leen o escuchan, y eso dificulta la toma de decisiones informadas y la participación cívica. Nos volvemos cansados de participar, y en el peor de los casos de quien lanza los bulos, dejamos de creer en todo.

Polarización social: 
Los bulos a menudo se utilizan para exacerbar las divisiones sociales y fomentar la polarización, la violencia verbal. Al difundir información falsa que confirma las ideas preexistentes de las personas, los bulos pueden crear una atmósfera de desconfianza y hostilidad entre diferentes grupos sociales. Nadie lanza un Bulo absurdo de algo que no es posible que exista, los Bulos se asientan en conceptos que ya funcionan de antemano. En la mayoría de los casos sirven para reforzar, para polarizar, para añadir información sobre una posible verdad pequeñita.

Daños a la salud pública: 
En el caso de la salud, los bulos pueden tener consecuencias graves, como disuadir a las personas de vacunarse o seguir tratamientos médicos recomendados, o pensar que la Sanidad Pública ya no funciona bien. La pandemia de la COVID-19 ha demostrado cómo los bulos relacionados con la salud pueden propagarse rápidamente y tener un impacto significativo en la salud pública. La sociedad constantemente busca seguridad para sí y para su familia.

Perjuicios económicos: 
Los bulos también pueden tener un impacto negativo en la economía. Por ejemplo, los bulos sobre la solvencia de una empresa pueden provocar caídas en el mercado de valores, o entre sus proveedores y clientes, mientras que los bulos sobre la seguridad de un producto pueden dañar la marca de una empresa y afectar sus ventas.

Violencia e incitación al odio: 
En casos extremos, los bulos pueden incitar a la violencia y al odio contra individuos o grupos específicos. La difusión de información falsa sobre un grupo en particular puede generar miedo, resentimiento y, en última instancia, violencia física. Las Guerras funcionan muy bien a base de bulos, pero a su vez se pueden comenzar a través de bulos que generen miedo o preocupación.

Combatir los bulos es un desafío complicado sobre todo por la calidad de estos creados en oficinas de desinformación pagadas y construidas por diversos tipos de organizaciones, y para defendernos de los bulos se requiere un esfuerzo conjunto por parte de todas las personas, instituciones, medios de comunicación y plataformas online. 

Es importante que todos seamos críticos con la información que recibimos y más con aquella que compartimos, y que recurramos a fuentes fiables para verificar la información antes de difundirla. 

Nada es verdad hasta que al menos dos fuentes diferentes y fiables la han publicado o comentado. Simplemente por salud pública.