25.6.09

A Zapatero le crecen los granos de adolescente

Todo estadista se hace, aunque dispone de una predisposición para tener suerte y ser un excelente gestor de las crisis.
Sin esa capacidad de control de su equipo, de sus problemas, de una gestión eficaz y una dosis de suerte del ganador, es muy complicado pasar a la historia.
La metedura de pata de Alonso el otro día es de enmarcar en papel de cocina y tirar a la basura.
Que Felipe o Almunia empieces a hablar en público es un dato de que el PSOE se encuentra en un momento complicado, aunque mucho mejor gestionado que el PP.
Y la culpa nunca es de los "aprendices", de Pajín o Aido, como se apunta en algunos sectores, la responsabilidad es de Zapatero, que debe liderar y resolver.
Los últimos cambios ministeriales no fueron buenos y no es necesario que el PP lo diga para que se note en las sensaciones. Las medidas tomadas ante la crisis son basculantes y a veces muy escasas de substancia y capacidad en el medio plazo. Estamos hablando de una crisis seria que se tiene que edificar sobre cambios profundos y cimientos que permitan crear nuevas alternativas económicas y sociales. La izquierda española sigue congelada en el siglo XX por no decir en el XIX, y hoy se necesitan nuevas ideas.
El tema de la energía nuclear es un ejemplo de mala gestión política añadida. Se puede opinar a favor o en contra, pero sin duda, se debe abrir el debate con calma y seriedad, porque la historia nos enseña que muchas opciones son a veces desechadas por no saber estudiarlas a fondo.
En estos momentos la sociedad está formada por consumistas convulsivos; es lo que hemos creado entre todos. Es el sistema con el que se hicieron multimillonarios una inmensidad de jetas capitalistas.
Intentar ahora que esa misma sociedad consumista tenga que pagar en impuestos los excesos de los jetas, es imposible. O lo que es lo mismo. Es imposible sin que cruja el sistema. lo cual incluso, puede ser hasta bueno.
Luego si el PSOE quiere estar dentro del sistema capitalista, debe optar por dos sistemas claros, a cual peor.
O subir los impuestos y aceptar la energía nuclear como animal de compañía entre otras medidas impopulares pero tragables.
O bien convocar elecciones anticipadas y dejarse perder (cosa muy sencilla por otra parte), para que sea un PP roto quien intente hacer la tarea dura de salir de la recesión a costa de medidas impopulares.
Si el PSOE deja que el PP se recomponga y tome aire su líder, en las próximas elecciones generales de dentro de 3 años, se asentará el PP por los años y los años. Y si no, al tiempo.

23.6.09

Dipear. Dar sorbitos a toda la vida, a todo en la vida. Saborearun poco de todo.

Somos una sociedad del tapeo. Hemos exportado la “tapa” a toda la vida que nos rodea. Pequeños platitos para degustar algo de todo.
Compramos en “los chinos” cosas que duran poco porque nos gusta comprar y tirar. Comemos en un Buffet porque así podemos tomar cien trocitos de cositas sin sabor. Viajamos hasta el fin del mundo, pero en cuanto llegamos ya nos hemos dado cuenta de que aquello es una mierda y nos queremos volver. Nos bajamos un disco de Internet porque no los vamos a escuchar más de una vez. Vemos una película en la televisión, sin cortes por anuncios y nos jode porque no nos podemos ir a mear.
Hacemos el amor en 12 segundos, besamos mucho de pico a l@s amig@s en el rostro sin darnos cuenta si tienen barba o huelen a maravilla, nos regalan libros que nunca abrimos y menos leemos, somos tiranos por un día en la reunión de vecinos en donde siempre hay un par de bobos que ponen a parir al de la limpieza, somos humanos otro día porque le damos cinco euros a un pobre y nos creemos que le hemos resuelto la vida.
Los anglosajones utilizan un verbo de moda. “Dipear”. Dar sorbitos o lamer algo. Como una mezcla entre saborear y catar en nuestro idioma. Dar bocaditos pequeñitos a todo, y si es posible en el mismo día, miel sobre hojuelas.
Nos casamos un poquito, nos lamemos otro poquito, vamos a misa en las bodas para poder ir al cielo y odiamos a los diferentes lo justo para no sentirnos en pecado.
Somos Dios los viernes por la tarde y el Diablo los lunes por la mañana.
Estamos exportando las “tapas” a nuestra nueva forma de vida.