2.8.25

En Almería no pueden vivir sin inmigrantes


Este cartel puesto por un partido político en Almería es una muestra más de lo equivocados que estamos todos sobre el valor real de la inmigración en España. Lo malo no es que ese partido político esté equivocado, lo malo es que algunos españoles mal informados se creen sus mentiras.

Deberían irse una semana por Almería los que piensan que este cartel tiene solo un mínimo de verdad, de utilidad, de realidad social. 

Creo que nos falta formación social, económica, y sobre todo viajar mucho más, pero no a las playas de cubalibre por las noches musicales, sino a las múltiples realidades de nuestro país.

Almería sin inmigrantes y sin cine del Oeste en sus desiertos, sería una tierra vacía. De lo segundo ya no queda.

Lo malo de estas propagandas no son el poder que manifiesta un determinado partido político, lo malo son las personas que se creen esas fábulas, y dicen que les votarán. Lo malo no son las ideas que propagan (que sin duda, también y mucho) sino que hay millones de españoles y europeos que se las creen. 

Con mentiras no se logra mucho, pero si se es capaz de lograr algo es a base de que los que tienen las verdades no sepan explicarlas o se las callen por diversos motivos idiotas.

Por cierto. Yo sí soy inmigrante. Vivo en Aragón en donde nací, pero mi padre era soriano.

Nos podemos mear en la cama si seguimos jugando con armas nucleares


Ya no se trata de que Trump nos vaya diciendo que es el más potente en aranceles y comercio, ahora ya es capaz de advertir que se alguien declara contra los EEUU le manda unos submarinos nucleares, de momento solo para acojonar. 

Esto nos lleva a la siguiente pantalla. ¿Y si hay un tonto inútil que se equivoca en sus provocaciones, y da un pequeño paso más?

Estamos rodeados de tontos inútiles, que es otra categoría de los tontos útiles, y mucho más peligrosa. Ya no es que se dispara una bomba nuclear, que también es posible, sino que se produzca un accidente o se de sin querer un paso idiota más.

Cuando yo era niño me decía que no jugara con fuego, que luego me mearía en la cama. Y creo… creo que ya entonces eran capaces mis padres de imaginarse los 
momentos tontos de Guerras Frías mantenidas.

El presidente Donald Trump, ordenó este viernes desplegar dos submarinos nucleares ante lo que consideraba unas “provocadoras declaraciones” del expresidente ruso Dimitri Medvédev. No dijo dónde exactamente los mandaba, pero explicó que se trataba de una precaución ante las amenazas del hoy subjefe del Consejo de Seguridad de la Federación Rusa.

“He ordenado el despliegue de dos submarinos nucleares en las regiones adecuadas, por si acaso estas declaraciones insensatas e incendiarias fueran algo más que eso. Las palabras son muy importantes y a menudo pueden tener consecuencias no deseadas. Espero que este no sea uno de esos casos”.