11.12.06

Igualdad de oportunidades entre Reyes y Papás

Este año me ha tocado diseñar alguna felicitación de Navidad en la que el Rey Baltasar iba en medio, todo un detalle que ya tardaba. 

Para compensar, a Papá Noel lo ponemos en los balcones por triplicado, porque si tiene que trabajar tanto como los tres Reyes, tendrá que tener compañía para no sufrir abuso laboral.

Pero esto de dar pistas a los malos no me gusta nada. Yo sé que los ladrones principiantes están fijándose en qué balcones ponen Papás Noeles colgados, para intentarlo en cuanto llegue la cuesta de enero, que vendrá seguro.

Pero lo que peor entiendo es lo de los chavalillos que estamos liando de mala manera. No me extraña que luego no aprueben la ESO.

¿Qué pensara un chaval de pocos años cuando vea los cientos de Papás Noeles que les hemos colgado por los balcones a modo de Port Aventura, y ve que están allí todos los días quietos sin avanzar con el frío que hace, y para más asco en su piso nadie se cuelga nunca para darle esperanzas? 


Lo tiene que estar pasando fatal. No, no me sirve que le digamos que él es del paquete de los Reyes Magos, porque enseguida se cambiará al ver que los Reyes no están en ninguna parte.

Estos liberales, que es como se llama ahora en fino a los que se dedican a quitarnos el dinero de nuestros bolsillos de manera suave y sin dolor, pero que al final se lo llevan igual, son los que se han inventado a Papá Noel para obligar a los niños a escribir dos cartas. 


Es curioso, ahora que ya no escribimos a nadie, los niños en una semana tienen que escribir dos cartas. Lo que no consigan los neoliberales no lo consigue nadie. Creo que están estudiando fechas para enero, y San Potito de Cerdeña tiene todas las de ganar para ser el tercero en discordia. El Rey de la Rebajas, ya que se celebra el 13 de enero.