18.5.20

El león miraba siempre hacia su cueva aunque estuviera huído

Sentirse ciudadano de muchos sitios es pesado pues necesitas siempre la cueva para descansar, para tocar "tula" o para sentarte y mirar los alrededores. Todos necesitamos tener una cueva "nuestra".

El caso es que todos necesitamos tener el referente de los chiqueros, nos acorralamos hacia los maderos en busca del cobijo. Somos animales indefensos ante el dolor y la furia.

Pero el tiempo que pasamos alejados de las tablas, en medio de la plaza pública lejana y diferente, disfrutamos como chiquillos conociendo paisajes, personas, artes o sensaciones. 

Es la duplicidad de necesidades. Estar aquí o estar huido. Moverte con el viento, como el viento, contra el viento.