11.12.14

Mentiras de la Iglesia, que son pecados graves- ¿Irán al infierno?

Pedofilia, apropiaciones o mentiras van saliendo día a día desde Papas a Diáconos, pastores de la santa madre iglesia. Teólogos implicados en el uso de la palabra de Dios haciéndola propia para dar a conocer las bondades del cristianismo al mundo católico, se están cubriendo de gloria, y no precisamente divina. De sus diez mandamientos, cinco de ellos se ven incumplidos por algunos de esos sacerdotes no precisamente ejemplo de castidad, ética y moral.

El celibato sacerdotal contempla la  homosexualidad, acción que nunca puede ser bien entendida por  los feligreses que ven en ellos la santidad hecha carne, otros quizás más aperturistas lo podrán disculpar: ¡si es consentido y entre adultos  ellos verán!.

El sacerdote no deja de ser humano como persona racional, pero cuando su conducta deriva a irracional  en aberraciones hacia menores no tienen perdón ni de su Dios y menos de la sociedad.  Siglos en la Jerarquía eclesiástica de oscurantismo y actuales clérigos por abusos sexuales o encubrimiento siguen saliendo a la luz en casos descalificables, fueran consentidos o no.

Casos recientes de pederastia como el de los tres sacerdotes y un seglar en Granada, disculpando sus vergüenzas el propio arzobispo de esa  diócesis Francisco Javier Martinez, llegando a decir que el sexo oral no es pecado si se piensa en Jesús. Acusación en Aragón de abusos y robar (presuntamente) del cepillo 210.000 euros el cura de Borja, o el de Epila por un supuesto acoso al diacono, mientras el emérito arzobispo de Zaragoza le prima a este por ocultar el misterio. Por cierto, mentirosillo nos salió Ureña, arzobispo de Zaragoza obligado a dejar su cargo por el papa Francisco y no por enfermedad, como dijo al dejar el cargo de la diócesis zaragozana.

Trabajo tiene la iglesia si quiere evitar esa decadencia de fieles y sacerdotes, en una religión con un 7 % de abusos sexuales documentados graves a menores.

                                                                                       Daniel Gallardo Marin

El Presidente del Gobierno cobra 384 veces menos que un chofer

El mismo día en que nos enteramos que Mariano Rajoy cobra al año 78.185 euros nos dicen que Fernando Alonso cobrará el próximo año más de 30.000.000 de euros. El primero pagará a hacienda por todo, el segundo logrará escaquearse. El primero tiene que dar la cara de amargado y el segundo es aplaudido y vitoreado.

Algo más no funciona en este tinglado de vida. Somos imbéciles. Así queda claro que nunca lograremos tener de Presidente del Gobierno al mejor, ni tan siquiera al regular. A poco que sepa ir en bicicleta, en coche o mover una pelotica, se nos irá de rositas.

Un país que es capaz de entender que cobra 384 veces más un corredor de coches que sale con la bandera de su país, que su propio Presidente de Gobierno, que también sale con la bandera de su país, ese país digo, está funcionando mal. Me da igual quien paga a quien, lo que me importa es qué cobra y por qué cada uno, pus el mundo está globalizado, y si quien paga es un banco, como este banco vaya de enfermo, quien tiene que soltar la gallina para normalizarlo somos los mismos que pagamos al Presidente del Gobierno.