30.1.08

Las sedaciones de enfermos terminales

En este caso, lo grave ha sido y será el trato que se está dando a muchos enfermos que en sus últimos momentos de vida, no tienen la suerte de disponer de un médico que le alivie el sufrimiento del dolor de la muerte.
Dios de existir, no pudo saber que seríamos capaces de mantener la vida artificial solo para joder.
La suerte de tener a alguien que te quiera dar una pastilla o diez.
Morir es muy duro, y sobre todo en muchos casos, muy largo.
Morir es muy doloroso en algunos casos, y hoy la vida es más larga pero no con más calidad, hemos sido capaces de alargar el tiempo de vida de forma artificial, pero eso debe ir acompañado de unos cuidados paliativos que procuren que al menos el enfermo, tu y yo, no suframos en los últimos días o semanas o meses.
Los que hemos tenido la desgracia de tener a alguien cerca en estas situaciones, sabemos lo complicado que es para todos tomar decisiones, lo complejo que es incluso buscar al médico acorde con sus propias ideas, y que sea capaz de tomar decisiones o de escucharte. De recetarte o de darte libertad de actuacion cuando ya incluso eso has perdido.

Yo no quiero morir sufriendo, no quiero vivir artificialmente, yo necesito a médicos como el Doctor Montes y miles como él, que saben lo que es la muerte, porque trabajan con ella, dentro de ella.
Espero que los políticos que han jugado con este tema, se encuentren en sus últimos días de vida, con médicos como el Doctor Montes.

Yo quiero libertad para morir de mi vida.