20.11.13

Muchos locos estamos felizmente cuerdos


Hay muchos locos en la calle y cuerdos entre algodones médicos. Son periodos de tomar pastillas, de ir al psiquiatra a pedir ayuda, cuando deberían ser otros los que NO estuvieran jodiendo todos los días a una sociedad que grita: ¡ayuda!, con furor.

Los raricos no somos locos, tal vez solo diferentes, distintos a la mayoría por variados motivos. Incluido por que así lo deseamos.