10.4.09

Las puertas que se cierran

Las puertas se nos pueden cerrar, pero dicen que entonces, se suelen abrir ventanas por las que entra aire fresco y renovado, que permite tomar impulsos.
Nada es eterno, ni lo eterno, luego todo depende en gran medida del color con que miremos los envoltorios de las situaciones, de la fuerza que pongamos nosotros en vencer los cierres.
Si alguna puerta se nos cierra, simplemente debemos esperar, ver, escuchar, respirar fuerte, y tomar impulso.
¿En donde nos hemos quedado cuando se nos ha cerrado la puerta?
¿Estamos dentro o fuera, a un lado o al otro?
Simplemente, cuando una puerta se cierra, nos separa del otro lado. Pero nunca sabremos entonces, en ese momento, donde se estará mejor en un tiempo, si de este lado o del otro lado de la puerta.