13.2.14

No cuentes nunca las visitas de tu blog. Pueden no gustarte

Esto de contar las visitas a lo que escribes es falso, para bien y para mal. Te llegan visitas desde robot que rastrean para saber qué escribes y "visititas" de algunos que se quedan segundos. Por otra parte tienes seguidores abonados o subscritos que reciben por email tu entrada sin querer saber cuantos la leen y cuantos la tiran. Y te leen algunos desde redes sociales, otros desde lectores RSS e incluso los hay que emplean Flipboard o parecidos sin que sepamos si estas lecturas quedan reflejadas o no. Muchas veces escribes para ti, para vaciar la mochila, para descansar. Y lo curioso es que tal vez te lean pero es muy complicado que te respondan, te comenten. En uno de mis blog casi nadie me pone comentarios pero en cambio los pocos que llegan y responden es para interactuar en serio, para pedirme colaboración o ayuda directa. Nunca sabes de qué depende el éxito. Quiero decir que yo no lo sé todavía. Bueno si, sé lo que es el NO ÉXITO, pero el otro se me escapa y no será por años. Uno sabe que a partir de un determinado número de intentos ya nunca se conquistará el mundo. Pero siempre es posible conquistarte tú mismo.