21.3.14

Se nos fue Adolfo Suarez hace años. Ahora se nos irá su recuerdo

Adolfo Suarez fue un político franquista que supo leer perfectamente los tiempos nuevos que venían tras la muerte del dictador y desde antes de ser designado para Presidente del Gobierno supo tomar las decisiones necesarias aun en contra de los militares y sin duda de todos los franquistas que sabían "era uno de los suyos".

Aquella construcción de la nueva España, hoy vapuleada la Transición desde el desconocimiento absoluto de la realidad social de aquellos años, fue un ejemplo de luces y sombras, de logros y fracasos, de duras peleas entre todas las partes. En toda negociación se logra una parte y se pierde otra, tanto para una parte como para la otra.

Ahora se dice tontamente que no se debería haber admitido la Transición. Se olvidan los que así hablan que en toda batalla se puede ganar. Pero también perder. Que en aquellos años la extrema derecha SI existía en las calles de España y mataba cuando no pegaba palizas por la calle amedrentando a los jóvenes por vestir de rojo o llevar el pelo largo por poner un ejemplo.

Adolfo Suarez es un hombre sufrido, duro y roto por su vida personal, poco reconocido y que no nos deja "su" verdad, lo cual es una pérdida dramática para la historia de nuestro país. 

Queda en el recuerdo su: "puedo prometer y prometo" su reconocimiento de la OLP y sin duda la legalización del PC más todo el esperpento político de sus dos últimos meses como Presidente arrojado al suelo por sus centristas de UCD lo que no logró el golpista Tejero.

Lo odié mientras gobernó, lo entendí cuando fue destrozado por sus fieles a bocanadas de odio retenido por años, lo aprecio desde el recuerdo de que formó parte de mi vida política desde "el otro lado" sabiendo que no ha vuelto a salir una generación de líderes desde aquellos tiempos.

No debo olvidarme de recordar su inmensa capacidad para comunicar. Nadie desde entonces y han pasado 35 años, han sabido emplear los medios como él para mover sus ideas entre los ciudadanos. Adolfo Suarez con internet y las redes sociales hubiera sido todavía más peligroso para sus competidores ideológicos.