8.10.13

¿Qué es ser de izquierdas en el siglo XXI? Yo no lo sé con seguridad


No es posible asegurar con claridad qué es ser de izquierdas en estos años primeros del siglo XXI, lo cual es un mérito de la derecha. Aunque ellos tampoco saben bien qué es la derecha, caminando hacia un anarquismo interno, pues tampoco quieren regular mercados sino darles libertad total, anarquismo del beneficio, diría yo.

Pero volvamos a lo que pretendía. ¿Sabemos qué es ser de izquierdas hoy? Estamos, estoy, tan liados entre varias ideologías que se mezclan hasta formar papillas extrañas, que el barro no nos deja ver el camino. Y tropezamos, claro. Nos faltan líderes que nos actualicen las ideas.

Ser de izquierdas debes ser repartir, cuidar la educación bien construida sobre el humanismo actualizado, mimar la justicia social, creer en el valor de la cultura, asumir que la paz hay que trabajarla, estar convencido de que los tiburones solo quieren beneficios para ellos, que el esclavismo aunque lo pinten de rosa existe y nos lo quieren meter con derecho a consumir, que el trabajo es un derecho y no una mercancía con la que nos pueden dominar, que quien tiene el dinero no tiene el poder y esta es la clave de la defensa y la gestión de izquierdas.


La izquierda no debe estar en contra de la empresa sino debe crearla y dirigirla. Se puede ser empresario y de izquierdas, lo juro, es cuestión del siglo XXI. No creo que el Estado sea ya nunca capaz de crear empresas a miles para controlar los mercados, pero si creo (seré idiota) en miles de empresarios "normales" que crean en sus proyectos desde la responsabilidad social y el reparto cooperativo del trabajo y el beneficio. Es cuestión de la discriminación positiva. Más SLL y menos SA o SL.

La izquierda debe permitir todo tipo de pensamiento -algo que le cuesta mucho a la derecha- incluso aquellos absurdos que se rodean de ángeles y demonios, pues peor es no creer en nada.

La izquierda debe vigilar el consumismo como una trampa en la que nos meten a los esclavos para serlo durante más décadas. Somos libres para equivocarnos, pero al menos alguien nos debe enseñar la diferencia entre ser bobos dominados o bobos libres.

Tal vez ser de izquierdas es enseñar a pescar, pero a renglón seguido enseñar a cocinar el pescado con especies y en su punto, pues además de ser productores tenemos que investigar la forma de ser más ricos para poder repartir mejor. Solo los ricos de algo pueden ser tan egoístas como para quedarse con todo o tan inteligentes como para repartirlo entre muchos. Lo segundo otorga más satisfacción al ser humano.