21.3.15

Lo que deben sufrir las madres de los asesinos

A veces me pregunto si las madres de los asesinos y terroristas saben antes que nadie que sus hijos van a crear miedo, dolor, sangre, terror. Las madres son listas de asustar, lo saben casi todo por los gestos y miradas, así que estoy seguro que si, que ellas ya intuyen que han tenido a un hijo asesino, violento, cabrón. ¿Pero qué van hacer?

Una madre es una madre sobre todo de sus hijos, y los comprenden que es medio camino de la comprensión. Se engañan para sobrevivir del dolor, miran hacia dentro y se lloran sin que lo notemos pues las madres lloran mucho sin que se lo notemos; pero es lo que tiene ser madre, que según van creciendo aprenden a llorar por dentro sin que lo noten ni ellas, que debe ser la peor forma de llorar.

Las madres de los asesinos deben ser silenciosas de respeto, calladas de voz para no tener que justificar nada. Suelen ser negras de ropa y apagadas de brillo pues se sienten culpables. Son muchas las madres que siempre se sienten culpables, que no es ni mucho menos lo mismo que sentirse responsables. Ellas si tienen que elegir siempre elijen ser culpables. Creen que así pagar parte del viaje de sus hijos. Las madres se esconden de sus hijos asesinos para no tener que darles una buena colleja, pero en su escondido rincón ni la penitencia les acerca al cielo. Por eso solo lloran y sin que lo note nadie. Sobre todo sus hijos.