13.7.10

Víctor Morlán está enfermo de "madrilitis" y no tiene cura

Víctor Morlán viene a Zaragoza para hacerse “la foto” y no habla porque no le da la real gana. Eso es asertividad y lo demás tontadicas.
Casi nunca hemos tenido suerte con esos políticos aragoneses que se van a Madrid a representar, y enseguida se olvidan de donde son sus padres y sus hijos. Vamos, que les entra una enfermedad que debe ser contagiosa y que es “madrilitis aguda” de compleja solución. Cuando los despiden se quedan en “su” Madrid y no vuelven, excepto Roldán, que maldita gana también romper el ejemplo con este tipejo.
Con los cercanías en Zaragoza han jugado a caballo perdedor, sabían que no funcionarían nunca. Eso o es que son imbéciles. Si hacemos una línea irregular, con frecuencias de 1 hora, estaciones fuera de las zonas urbanas, sin proximidad a los polígonos industriales, sin conexiones; lo ilógico es que tuvieran más de un viajero por día. Y encima hay más de uno. Todo un éxito, lo juro. Así que ahora se les llena la boca con decir que no podrán más servicios hasta que haya más viajeros, lo cual está muy bien. Yo, si mandara, intentaría sacar dinericos de algún sitio y montaría una empresa de Ferrocarriles de Aragón para hacer la competencia, con líneas de Huesca a Teruel, de Alcañiz a Calatayud, de Fraga a Belchite. Puestos a tener que pagar, como nos amenazan desde Madrid, al menos sería yo quien organizaría las pérdidas.
Lo que es urgente es que echen a Morlán del Gobierno de Madrid, que nos pongan a un canario o a un gallego a defender los intereses de Aragón en Madrid, que seguro que lo hará mucho mejor que esos disfrazados de aragoneses que sólo piensan en quedarse fijos en Madrid. Aunque sea de apagavelas. Eso o aprender que para representar a Aragón lo lógico es que votáramos a partidos aragonesistas. Y hay dos. CHA y el PAR. Uno de derechas y otro de izquierdas. Vamos, que hay para elegir, que no hay excusa.
Por cierto ¿y el PSOE aragonés es incapaz de presionar el botón del teléfono rojo?. Lo siento, me acaban de decir que Aragón no tiene ni teléfono.