25.12.13

Cómo cambiar de creencias sin pecar en el intento

Esta es la..., pues la cincuentaytanta Nochebuena que paso creyendo. Todavía no sé en qué creo, pero cada vez es en menos cosas. Alguna queda pero se tambalea también. Una vez que ya no me quede ninguna ¿qué hago conmigo mismo? No se puede vivir sin creer pero sí se puede elegir en el qué. Algo es algo. E incluso he llegado a creerme que se puede cambiar de creencias varias veces al año, lo cual es una ventaja para las equivocaciones. O para los bobos que como yo no tenemos casi nada claro. Me han dicho que a lo sumo ysi te entra mal moral, te confiesas y punto pelota.

Voy a creer en la música, en el Arte, en el sol. Por elegir grandes cosas que no se pueden comprar más que con los sentidos.