12.5.19

Rubalcaba y su inteligencia imprescindible para que todo funcione

La figura de Alfredo Pérez Rubalcaba es la de un sabio político, callado, que nunca quería ser y siempre era, del clásico fontanero que todas las organizaciones de todo tipo necesitan para que las cosas funcionen bien. Es complejo de explicar, pero en todos los grupos de trabajo se necesita el “obrero” de campo de juego que sepa sacrificarse sin sobresalir, que sepa andar entre barros para rescatar princesas o que sepa resolver los problemas asquerosos que nadie quiere meter mano.

Dicho así parecería la figura oscura y negativa del político, pero también es necesario el médico de culos y tripas para que nos funcione bien el cuerpo humano. Y hay que agradecérselo por sus trabajos y sobre todo por sus osadías, por su fino sentido del humor y por su inteligencia para saber estar. Sabía abrir puertas, y si hacía falta cerrarlas pero sin portazos. Todo un lujo que siempre es necesario tener para engrasar los motores que se hacen pesados y viejos.