3.7.09

El low cost (bajo coste) nos va a invadir.

Los chinos que para algunas cosas son especialmente atrevidos, ya están estudiando la posibilidad de viajar en avión de pie, apoyados como en un bar sobre una barra o un taburete alto, ocupando un 40% menos de espacio.
La moda del low cost se nos está imponiendo, a velocidades altas.
Nos llenamos el depósito de gasolina nosotros, pero no hemos visto menguar el precio, aunque en los bufett de comida fría (casi siempre está fuera de temperatura) somos nosotros los que recogemos, servimos y volvemos a dejar los platos sucios, para evitar mano de obra.
Y eso que hay parados a punta pala.
Separamos las basuras para suprimir más mano de obra, compramos los billetes de tren por internet, nos pagamos nosotros mismos la compra en el super con esas cajas rápidas sin cajera de carne y hueso, y en los museos nos endiñan un aparato al oido para evitar al guía de toda la vida.
Y si es posible viajar en avión de pie, ¿porqué no lo hacemos ya en tren, en autobús o en el coche? Estoy seguro que si se pudiera ir de pie, en un Mini podríamos metar a más de 20 personas.
Por este camino, pronto en el cine podremos estar de pie y las 4 personas que van a ver la peli, se verían más. Y en el fútbol recobraríamos la imagen de 100.000 personas de pie gritando como fieras y no como ahora que sentados con almitas de la caridad. ¿O no?
Yo en casa ya he empezado por la idea. A partir de mañana todos comeremos de pie. Así me evito tener que recoger la mesa, que es un peñazo, con perdón. Se les pone la servilleta en el cuello y a zampaar bocadillos de pie mientras ven "Escenas de matrimonio" que es muy instructiva para avanzar en los divorcios.