8.4.12

Las debilidades de España como país que se cree independiente

Creo que nos hemos equivocado como sociedad en excesivas cosas, de las que todos debemos sentirnos responsables con arreglo a nuestra importancia social e implicación. Y creo que es básico asumir lo que hemos hecho mal, para partir de esa estación llamada "responsabilidad asumida" en busca del destino, sea malo, peor o mejor.

No hemos sabido construir con cimientos el edificio de la transición en España y se puede opinar así cuando ya han pasado más de 35 años del inicio de un periodo complejo pero ilusionante, tal vez por que en la medida en que nos iba bien, pensábamos que íbamos por el buen camino. Y no. Nos iba bien por que partíamos de una situación fatal, a años luz de Europa y nuestro entorno, a una distancia tremenda de la modernidad social del mundo occidental. En el camino hemos tragado excesivos sapos y hemos avanzado a golpes positivos sin pararnos a pensar si los saltos tenían el tamaño y dirección necesarios o si simplemente eran positivos y con eso nos conformábamos. Ahora toca mirar atrás, observar qué hemos hecho mal, e intentar resolver los problemas. Pero sin cimientos, vamos a tener que tirar parte de lo construido.

 ¿Cómo vamos a ser capaces de compartir lo que hay que hacer si sobre todo desde la izquierda queremos huir de los catecismos y de las explicaciones, pensando que solo funciona la gestión y no la explicación?
 Nuestras relaciones exteriores como país han sido muy malas. Hemos sido amiguetes de América, Europa o el Norte de África y según épocas en estas décadas. Pero hermanos de nadie.
 Nuestra relación con la iglesia católica es errónea y sin que como país hayamos sabido marcar la independencia.
 Nuestra relación como sociedad con nuestra clase política es errónea y hay que cambiarla con urgencia. Nos necesitamos mutuamente.
 No hemos aprendido a entender los impuestos y a respetarlos.
 Seguimos siendo una sociedad que se esfuerza poco y con serios problemas de productividad por su mala organización gerencial.
 No valoramos la formación, la investigación, la implicación social.
 Creemos que lo "gratis" no vale mucho más de lo que se paga.
 La corrupción económica a todos los niveles de gestión es brutal. Y aquí incluyo a empresarios, profesionales, banqueros, políticos de medio pelo, artistas.
 No conocemos ni defendemos a España como marca social y como cueva que nos acoge y así es imposible competir en igualdad de condiciones con nuestros países del entorno.
 Hemos creído erróneamente que gestionar es ordenar sin tener que explicar, al pensar que informar es una debilidad política.
 No hemos creado una industria suficiente, un tejido productivo pensando en el futuro de una sociedad que está en constante competencia con un mundo muy competitivo.
 No hemos aprendido de Europa a crear un mercado laboral comparable. Es inexplicable nuestra debilidad en calidad de empleo, en el gran drama del desempleo que como plaga bíblica nos invade cada vez que estornuda nuestra economía.
 Nos hemos endeudado de idioteces, sin entender de precios, intereses o valores. Y nos hemos endeudado sobre todo privadamente y además no lo estamos explicando por miedo.
 Nuestra estructura orgánica como país es excesiva y mal planificada. No hemos avanzado hacia el federalismo útil, seguimos empleando Diputaciones y provincias obsoletas, organismo de tercer nivel que no sirven, multiplicidades absurdas que se solapan o se estorban.
 Ante la actual crisis pensamos que la culpa es "de otros" y que no somos capaces de hacer nada por mejorar o resolver.