Tenemos mala cara, deben ser los tiempos, y ponemos peor cara antes las adversidades, ante las dudas, los problemas, las relaciones. No somos fáciles, no nos dejamos. Intentamos sacar rédito de todo y ahora, precisamente en los tiempos en los que es más complejo lograr avanzar y sacar sustancia a lo que nos rodea. Lo intentamos pero será difícil simplemente por que no nos dejarán. Ya no hay tantas oportunidades, simplemente porque todo el mundo está a la defensiva, ha aprendido, también quiere su propio beneficio, no está por la labor de “dejarse”.
O cambiamos entre todos esta manera de “ser” o lo tendremos cada día peor, pues no queremos mejorar ni ayudar a mejorar a los demás. Somos duros, tremendamente egoístas, pero lo curioso es que tampoco hacemos lo suficiente por mejorar en calidad de la de verdad. Yo no soy optimista, lo siento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario