20.4.18

ETA pide perdón. En el camino se queda la historia

ETA ha confirmado el sentido común social y su propia equivocación violenta que produjo en España heridas imposibles de cicatrizar del todo pues no es posible volver a la casilla de salida, pidiendo perdón. Perdón al dolor, perdón a la barbarie y a la idiotez social. España se escribió equivocadamente en su Transición a golpe de violencia, imposibilitando que se abrieran en paz otros senderos más democráticos, por culpa de los miedos que producía una organización terrorista que también fue muy bien utilizada por los poderes que no querían el desarrollo de la democracia.

Nunca podremos saber qué hubiera sido de la España de los años 80 y 90 si no hubiera existido ETA. Los medios económicos y personales que se dedicaron a combatir o a defendernos de la violencia de ETA no se pudieron dedicar a otros asuntos. Y en el camino, además de miedos y odios, cayeron 850 personas, varias de ellas insustituibles en los caminos de la España moderna y de diálogo social.

El País Vasco salió perdiendo y con él también España, y los resultados producen una tristeza inmensa vistos ahora desde la paz y el abandono de la idiotez. ¿Para qué, visto en el 2018 lo que estamos viendo? ¿Qué sería hoy del País Vasco y de España si no hubiera existido la ETA absurda y militar, que tuvo varios momentos históricos para reescribir el futuro de su sociedad, como sí hicieron otros miembros terroristas?