9.1.11

No sabemos, no nos enseñan, a trabajar en equipos humanos

No sabemos trabajar en equipo (menos en interdisciplinares), no nos han enseñado y lo que parece peor, no tenemos interés en cambiar y en aprender. Creemos que trabajar en equipo es darle facilidades al tonto de la clase para que disimulando se nos cuele en el paquete, cuando trabajar en equipo es complementar, es crecer desde la discrepancia ligera, es sumar diferencias y con ellas ya unidas presentar soluciones.

En las escuelas cuando se presenta a los alumnos un trabajo en equipo, ellos mismos elijen a sus colegas, forman los grupos y se disimulan. Mal de mal. Pero simplemente porque están aprendiendo. No se trata de encontrar la vacuna contra el cáncer, que eso ya les llegará de mayores, ahora se trataría de que fueran aprendiendo entre equipos diferentes, rivales, incoherentes, absurdos. Nada serviría mejor para el equipo que, primero enseñarles que es muy importante y que sirve para mucho saber trabajar en equipo y después saber adaptarse a las peculiaridades de cada grupo. Ya damos por sentado que en todo grupo habrá imbéciles jetas que no desearán trabajar, pero la obligación del profesor sería intentar que el grupo sacara “algo” de estos borricos de gana, para que el total del grupo saliera reforzado. En un trabajo en equipo se aprende de lo que se trabaja pero también y mucho de lo que se intenta en la relación de grupo.

Imaginemos ahora a todos estos españolitos de 20 años que van a tener que encontrar trabajo más pronto que tarde. ¿Qué nos creemos que les van a exigir en el mercado laboral? ¿están preparados para laborar en un entorno de equipos humanos en donde también hay jetas, vagos y maleantes? Los hay pero con la peculiaridad que suelen ser muy listos y disimulan perfectamente.

Nuestros hijos tienen que aprenden a trabajar en equipos no tanto para defenderse de ellos, como para sacar conclusiones productivas en su trabajo, para hacer crecer a su país, a su empresa, a su proyecto. En Europa se nos pide productividad, se nos exige capacidad de solución, ser maleables ante los tropiezos y ante las dificultades pero también ser complementarios. 

Y creo que en España seguimos sin enseñar a los niños y jóvenes que estamos en el siglo XXI y que ya no sirve de nada aprender de memoria tontadas y si y mucho saber defenderse ante los retos de investigación, aunque se trabaje de lo mas simple que uno se puede imaginar. Simplemente porque quien demuestre que sabe mejorar su puesto de trabajo, su producción, ascenderá en su empresa, conseguirá que su trabajo sea tenido en cuenta y valorado. Nos sobran medianías y nos faltan líderes.